Personal del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) de Carabineros rescató los cuerpos de los tres montañistas argentinos que murieron intentando subir el cerro Marmolejo.
Se trata del intendente de la localidad pampeana de General San Martín, Raúl Espir, al escribano (notario) Sergio Berardo y al guía de montañas mendocino Ignacio Lucero, de quienes se había perdido el rastro a finales de noviembre.
EL RESCATE
«Para estas diligencias tenemos que remontarnos que el día miércoles 22 de noviembre se inicia la incursión al cerro Marmolejo por parte de estos tres montañistas argentinos. Tenían llegada ese día viernes, por lo cual familiares y amistades, ante la no llegada de ellos, el día sábado ponen una denuncia de presunta desgracia en la 16 Comisaría de La Reina», detalló el capitán Camilo Carvacho.
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En ese sentido, explicó que el sábado los equipos del GOPE «proceden a hacer ascenso al primer campamento base que se encontraba a 4.800 metros sobre el nivel del mar, que era el campamento que mantenían los montañistas».
«Se logró coordinar una aeronave que tuviera la capacidad técnica para poder llegar a esa altura y el grupo de infantería comenzó a hacer el ascenso, mientras que otro equipo de GOPE en estas aeronaves visualiza los cuerpos que se encuentran en aproximadamente a 5.900 metros sobre el nivel del mar», agregó.
Carvacho detalló que recién el lunes «una vez que son identificados, los equipos de tierra llegan al lugar, los georreferencian y posteriormente, debido a las condiciones meteorológicas, se procede a bajar al campamento base de los rescatistas para poder recién el día de hoy (miércoles) planificar la operación y poder proceder a la extracción de estos cuerpos».
El operativo se efectuó con la ayuda de helicópteros, además de personal especializado.
LA FATAL EXPEDICIÓN
La expedición al cerro Marmolejo, que se ubica en el límite entre entre Chile y Argentina y compuesta por seis personas, comenzó el día 22 de noviembre con el objetivo de hacer la cumbre del cerro, un estratovolcán a 6.108 metros de altitud.
Al momento del descenso, el día 28 del mismo mes, se perdió la comunicación con Espir, Berardo y Lucero.
