Argentina: Sindicatos frenan reforma laboral de Milei: proyecto queda en suspenso hasta febrero.
Tras la masiva movilización sindical en Plaza de Mayo, el gobierno argentino frenó el avance exprés de la reforma laboral. Dirigentes sindicales y oposición celebran el retroceso y plantean seguir la lucha.
Los sindicatos de Argentina lograron este jueves un verdadero freno a la reforma laboral impulsada por el presidente Javier Milei. Tras una masiva protesta en Plaza de Mayo y la presión de la Confederación General del Trabajo (CGT) junto a otras centrales obreras, el oficialismo decidió postergar el tratamiento de la iniciativa hasta febrero, según reportó el medio argentino Página/12.
La decisión se produjo luego de que la CGT liderara una jornada de protestas que incluyó marchas, discursos en el corazón del poder político y mensajes claros de amenaza de paro general en caso de que el proyecto siguiera su curso sin modificaciones significativas.
Qué propone la reforma laboral y por qué generó rechazo
La reforma laboral del Gobierno buscaba introducir cambios profundos en la normativa vigente. Entre los puntos más debatidos estaban:
Modificaciones en las condiciones de contratación, con mayor flexibilidad para las empresas.
Cambios en el cálculo de indemnizaciones por despido.
Reducciones en contribuciones patronales.
Reformas en el régimen de negociaciones colectivas y ejercicio sindical.
El gobierno de Milei defendía la reforma como una herramienta para dinamizar el empleo formal y modernizar el mercado laboral, pero los sindicatos la consideraron un ataque a los derechos de los trabajadores, que podría llevar a una mayor precarización y flexibilización abusiva de las condiciones laborales.
Fuerte protesta en Plaza de Mayo con amenaza de paro general
La CGT, la mayor central obrera de Argentina, encabezó este jueves la movilización en la Plaza de Mayo. La convocatoria incluyó sindicatos de distintos sectores, movimientos sociales y el apoyo de partidos de oposición.
“El proyecto va en contra de los intereses de los trabajadores”, dijo Cristian Jerónimo, uno de los secretarios generales de la CGT, en el acto principal frente a la Casa Rosada.
Otro dirigente, Jorge Sola, afirmó que la central se opondrá “a cada punto” de la iniciativa y advirtió que, de no lograrse cambios, el movimiento sindical puede avanzar hacia un paro nacional.
Apoyo político y presión sobre el oficialismo
A la protesta asistieron dirigentes de la oposición, incluidos diputados y senadores, así como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien aseguró que la iniciativa “no tiene un solo elemento que beneficie a los trabajadores”.
Desde distintos sindicatos, como la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), también se realizaron medidas de lucha y manifestaciones en otras provincias.
Líderes gremiales del sector educativo, como Soledad Mosquera de AdEMyS, calificaron la reforma como una tentativa de “masificar condiciones precarias de trabajo” y pidieron profundizar la movilización hasta lograr un paro general conjunto con CTA y otros sindicatos.
Receso en el Congreso: reforma en suspenso hasta febrero
El freno al avance del proyecto laboral se produjo en medio de la discusión en comisiones del Senado argentino, donde el oficialismo intentaba obtener el dictamen de mayoría para llevarlo al recinto.
Sin el apoyo suficiente y ante la presión social y política, el Gobierno decidió retroceder en su calendario y postergar la discusión formal hasta febrero, cuando se espera retomar el debate con modificaciones o eventuales cambios de estrategia.
