La tarde de este domingo 17 de noviembre, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, autorizó a Ucrania a utilizar poderosas armas estadounidenses de largo alcance en territorio ruso. Esto se da mientras el gigante norteamericano ve con preocupación el despliegue de soldados norcoreanos en favor de Rusia.
De acuerdo a lo informado por CNN, a la administración Biden le preocupa que la entrada de los soldados de Corea del Norte pueda llevar a una nueva fase peligrosa en la guerra. Y es que Rusia desplegó casi 50.000 soldados en la región de Kursk, en donde anteriormente Ucrania había lanzado un ataque sorpresa para recuperar territorio.
Esta decisión fue bastante debatida durante los últimos meses entre las autoridades estadounidenses. Algunos manifestaron su preocupación por una posible escalada en la guerra. En tanto, otros expresaron su inquietud por la disminución en las reservas de armas.
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Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, presionó en varias ocasiones a Estados Unidos para permitir el uso de los Sistemas de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) contra Rusia.
Este es uno de los sistemas de misiles más potentes entregados a Ucrania, con una capacidad de lanzamiento de hasta 306 kilómetros.
Según comunicó la BBC, uno de los oficiales militares ucranianos reconoció que probablemente «esto no cambie el curso de la guerra, pero creo que hará que nuestras fuerzas sean más equitativas».
Desde Rusia aún no habrían reacciones a la autorización de Joe Biden a Zelensky para el uso de los misiles. Sin embargo, anteriormente ya había lanzado advertencias sobre este tema.
El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió en septiembre a occidente que no autorizara a Ucrania para usar los misiles. Afirmó que ellos verían esta acción como una «participación directa» de los países de la OTAN en la guerra. Sostuvo que esa autorización «cambiaría sustancialmente la esencia misma, la naturaleza del conflicto».
El mandatario afirmó que «esto significará que los países de la OTAN, Estados Unidos y los países europeos lucharán contra Rusia».
Según el Instituto alemán de Kiel para la Economía Mundial, entre febrero de 2022 y junio de 2024, Estados Unidos entregó ayuda militar a través de armas y equipos a Ucrania por un total de 55.500 millones de dólares.