El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró este sábado que no tiene intención de pedir asilo político en Estados Unidos, pese a enfrentar un juicio en el Tribunal Supremo por presuntamente liderar un intento de golpe de Estado contra Luiz Inácio Lula da Silva.
“Cero, cero, cero. Creo que me veo bien aquí. Tengo 70 años, me siento bien. Quiero el bien de mi país”, afirmó Bolsonaro en una entrevista con el diario Folha de São Paulo, descartando sumarse a su hijo Eduardo Bolsonaro, quien ha dejado temporalmente su escaño como diputado en EE.UU.
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El Tribunal Supremo aceptó esta semana una denuncia en su contra presentada por el fiscal general, Paulo Gonet. Se le acusa de cinco delitos relacionados con un complot para desconocer el resultado de las elecciones de 2022 y perpetuarse en el poder. Junto a otros siete exfuncionarios, Bolsonaro podría enfrentar hasta 40 años de prisión.
En la entrevista, el exgobernante aseguró que ir a prisión sería “el fin” de su vida y calificó el proceso en su contra de “injusto”. “¿Dónde está mi delito? ¿Dónde está la prueba de un posible golpe de Estado?”, cuestionó.
El juez instructor del caso, Alexandre de Moraes, sostiene que existen pruebas suficientes que vinculan a Bolsonaro con los disturbios del 8 de enero de 2023, cuando miles de sus seguidores asaltaron las sedes del Congreso, el Supremo y la Presidencia en un intento de derrocar a Lula.
No obstante, el exmandatario insiste en que “nunca” planeó un golpe, aunque admitió haber discutido con militares la posibilidad de activar “dispositivos constitucionales” como el estado de sitio.
