El gobierno de China ha criticado duramente la decisión de Estados Unidos de incrementar los aranceles a los productos chinos, calificándola de «coerción» y advirtiendo que esto afectará gravemente el diálogo bilateral sobre el control de drogas.
REACCIÓN DE CHINA
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, afirmó este viernes que «la presión, la coerción y las amenazas no son la mejor manera de tratar con China. El respeto mutuo es la premisa básica». Estas declaraciones surgen tras el anuncio de Washington de que duplicará hasta un 20 % los aranceles adicionales a los productos chinos a partir del 4 de marzo.
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«China deplora y se opone a esta decisión y hará lo que considere necesario para defender sus intereses legítimos», subrayó Lin en una conferencia de prensa. Además, criticó que estos aranceles unilaterales dañan tanto a la Organización Mundial del Comercio como a las relaciones comerciales internacionales, insistiendo en que «las guerras comerciales no tienen ganadores».
EL FENTANILO, UN PUNTO DE FRICCIÓN
Lin Jian también abordó la cuestión del fentanilo, señalando que es «un problema de Estados Unidos» y acusando a Washington de usar este tema como una excusa para presionar a China. Según el portavoz, el país asiático ha sido «uno de los más duros» en la lucha contra el tráfico de drogas y ha colaborado con EE. UU. para enfrentar esta crisis, obteniendo resultados «muy destacados».
CHINA INSTA AL DIÁLOGO
China instó a Estados Unidos a resolver los problemas comerciales mediante «el diálogo en condiciones de igualdad» y reiteró su disposición a seguir cooperando con Washington para mantener una relación «sólida, estable y saludable». Además, el Ministerio de Comercio chino advirtió que tomará «todas las contramedidas necesarias» para proteger sus derechos e intereses.
MEDIDAS DE EE.UU. Y RESPUESTA CHINA
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el jueves que impondrá un 10 % adicional de aranceles a los productos chinos, argumentando que Pekín no ha hecho lo suficiente para frenar el tráfico de fentanilo hacia EE. UU. Además, Trump vinculó la reducción de estos gravámenes a «progresos» en la lucha antidrogas e impuso tasas del 25 % a México y Canadá, asegurando que «muchas» de las drogas que ingresan a Estados Unidos provienen de China.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China rechazó estas afirmaciones, calificándolas de «llenas de una mentalidad de la Guerra Fría». Pekín ya había respondido a los primeros aranceles de Trump con un gravamen del 10 % al 15 % sobre ciertos productos estadounidenses, además de imponer controles a la exportación de minerales clave y abrir una investigación contra Google.
ANTECEDENTES DE LA GUERRA COMERCIAL
China también ha expresado su descontento con los aranceles estadounidenses del 25 % sobre las importaciones de acero y aluminio, señalando que exporta estos materiales a otros países como Canadá o México, que a su vez los venden a Estados Unidos.
Durante su primera presidencia (2017-2021), Trump ya impuso múltiples rondas de aranceles por un valor aproximado de 370.000 millones de dólares anuales sobre productos chinos. En respuesta, China aplicó medidas similares a las exportaciones estadounidenses, intensificando la disputa comercial entre ambas naciones.
EEUU ha vuelto a utilizar la cuestión del fentanilo como excusa para amenazar con imponer aranceles adicionales a los productos chinos. China se opone firmemente a ello y tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar firmemente legítimos intereses propios. pic.twitter.com/3qyySwLRQb
— Zhu Jingyang (@zhu_jingyang) February 28, 2025
