La economía de China creció un 5,2% interanual en el segundo trimestre de 2025, según datos oficiales difundidos este martes, cumpliendo con las expectativas del mercado. El repunte fue liderado por las exportaciones, en un contexto marcado por la guerra comercial con Estados Unidos y una creciente presión internacional para que Beijing intervenga en el conflicto en Ucrania.
El dinamismo exportador se produjo a pesar de los nuevos aranceles impuestos por el presidente estadounidense Donald Trump desde su retorno a la Casa Blanca en enero. El mandatario ha gravado productos chinos y de otros países, lo que ha generado incertidumbre en los mercados globales y ha obligado a Pekín a redoblar esfuerzos para sostener su actividad económica.
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Aun así, los líderes chinos enfrentan una compleja tarea: mantener el crecimiento en medio de presiones externas y una demanda interna que aún no despega con fuerza.
EXPORTACIONES SORPRENDEN AL ALZA
De acuerdo con la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) china, la producción industrial creció un 6,8%, superando las previsiones, mientras que las ventas minoristas aumentaron un 4,8%, por debajo del 5,3% proyectado por Bloomberg. Estos datos reflejan una recuperación desigual, con el consumo aún rezagado frente a otros sectores.
El subdirector de la ONE, Sheng Laiyun, afirmó que la economía nacional “resistió la presión y mostró una mejora constante”, destacando avances en empleo, ingresos y sectores innovadores.
Las cifras publicadas el lunes por la Administración General de Aduanas también apuntan a un repunte del comercio: las exportaciones de junio crecieron por encima de lo previsto y las importaciones avanzaron un 1,1%, el primer aumento del año.
UNA TREGUA FRÁGIL Y NUEVAS AMENAZAS
El repunte exportador se produce tras un acuerdo marco alcanzado el mes pasado entre Washington y Pekín en Londres, lo que permitió una “tregua arancelaria” que, según funcionarios chinos, fue fruto de “mucho esfuerzo”. Sin embargo, las tensiones persisten.
Trump endureció su postura este lunes al advertir que impondrá aranceles del 100% a los países que mantengan vínculos comerciales con Rusia si Moscú no detiene su ofensiva en Ucrania en un plazo de 50 días. El mensaje estaba dirigido, en parte, a China, que ha sido instada por Occidente a presionar al Kremlin para frenar el conflicto iniciado en febrero de 2022.
RIESGOS A MEDIANO PLAZO
A pesar del crecimiento actual, muchos economistas anticipan una desaceleración en el segundo semestre del año, debido principalmente a la debilidad del consumo interno y al prolongado estancamiento de los precios.
En junio, el índice de precios al consumidor apenas logró romper con una tendencia deflacionaria de cuatro meses, mientras que el índice de precios al productor cayó un 3,6% interanual, ampliando una racha negativa de varios años.
Para consolidar su crecimiento, los analistas coinciden en que China deberá acelerar la transición hacia un modelo económico menos dependiente de las exportaciones y la inversión en infraestructura, y más sustentado en el consumo de los hogares.
La locomotora productiva del planeta resiste los cañonazos arancelarios de Trump. La economía China ha crecido en el segundo trimestre un 5,2% El dato se encuentra ligeramente por encima de las previsiones coloca al gigante asiático en una posición favorable para seguir creciendo
— tomas friedmann (@friedmanntomas) July 15, 2025