El abogado y exagente de Chile en la Haya, Claudio Grossman, renunció a la Corte Penal Internacional (CPI) en protesta por la falta de acción contra los funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro.
Grossman, quien fue nombrado asesor especial del fiscal de la CPI, Karim Khan, desde noviembre de 2021, argumentó que sus estándares éticos ya no le permiten permanecer en silencio mientras el régimen de Maduro continúa cometiendo abusos.
En un correo revelador, Grossman condenó que tampoco se haya tomado acciones ante la expulsión de diplomáticos y obstruyendo el trabajo de los observadores de derechos humanos de la ONU.
“Ya no puedo justificar la elección de no tomar las medidas serias correspondientes contra los autores de las graves violaciones”, escribió Grossman según AP.
Tras esta decisión, se conoció que Khan llamó a Grossman para pedirle que reconsiderara su postura, pero no prosperó.
Según Associated Press, «el fiscal (Khan) está extremadamente agradecido al profesor Grossman por la experiencia y el trabajo prestado».
La decisión del chileno es una de las tantas presiones que hay sobre Karim Khan para que agilice el proceso en contra de Nicolás Maduro, acusado, entre otras cosas, de encarcelar opositores, apremios ilegítimos, persecución y asedio a embajadas de otros países en Caracas, como forma de perpetuarse en el poder.
Lee también: Fiscal de la CPI exige liberar niños detenidos en Venezuela
VENEZUELA Y LA CPI
Desde 2021, la CPI investiga formalmente denuncias de crímenes de lesa humanidad cometidos por el gobierno de Madura, entre los que se incluyen asesinatos, torturas, detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas ocurridas en contextos de protestas desde 2017.
Vale recordar que desde que se dio a conocer los resultados de las elecciones en Venezuela se ha acusado fraude, nacional e internacionalmente, desde entonces, más de 2.000 personas fueron arrestadas y al menos 21 muertes se han sumado a la lista.