Los Gobiernos de Colombia y Venezuela firmaron un memorando de entendimiento para establecer la primera zona económica binacional entre ambos países. El acuerdo, suscrito el 17 de julio en Caracas por la ministra de Comercio colombiana, Diana Morales, y la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, busca impulsar una zona de “paz, unión y desarrollo integral” en la frontera compartida. Sin embargo, la iniciativa ha despertado fuertes críticas en Colombia por parte de la oposición, que advierte sobre posibles riesgos para la soberanía nacional.
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¿QUÉ ESTABLECE EL MEMORANDO?
El documento firmado tendrá una vigencia de cinco años y establece una hoja de ruta para la cooperación bilateral en áreas como cultura, salud, educación, comercio y producción. La zona comprendería inicialmente los estados de Venezuela de Táchira y Zulia, así como el departamento colombiano de Norte de Santander. Desde Bogotá se plantea que otras regiones como La Guajira y Cesar podrían sumarse en el futuro.
La propuesta contempla además incentivos a la inversión extranjera —especialmente de países como China, India, Rusia y Turquía— y la cooperación en seguridad para combatir el crimen organizado, según lo declarado por el presidente de Venezuela Nicolás Maduro.
Por su parte, el Gobierno colombiano afirmó que el acuerdo tiene como fin fomentar la diversificación productiva, generar valor agregado e impulsar un desarrollo económico inclusivo y sostenible. Entre las metas está el fomento de cultivos legales como café, cacao, caña de azúcar, frutas tropicales y productos lácteos, en una zona especialmente afectada por la violencia y la economía ilícita.
LAS CRÍTICAS DESDE LA OPOSICIÓN COLOMBIANA
La oposición colombiana reaccionó con dureza ante el anuncio. El expresidente Álvaro Uribe acusó al Gobierno de entregar soberanía “al narcoterrorismo protegido por la dictadura de Maduro”. En la misma línea, el senador y precandidato presidencial David Luna (Cambio Radical) advirtió sobre una posible injerencia venezolana en departamentos como Norte de Santander, La Guajira y Cesar.
A juicio de estos sectores, el acuerdo podría debilitar la presencia del Estado colombiano en zonas fronterizas marcadas por el conflicto armado, el narcotráfico y el contrabando.
LA DEFENSA DEL GOBIERNO PETRO
Desde la Casa de Nariño han negado que la zona binacional implique cesión de soberanía. El presidente Gustavo Petro respondió directamente a las críticas señalando que el objetivo es favorecer la integración y mejorar la calidad de vida de las familias fronterizas. “Ningún soldado colombiano cruzará la frontera hacia Venezuela ni viceversa”, aseguró en redes sociales.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, aclaró además que el memorando no crea obligaciones jurídicas ni compromisos financieros entre las partes, ya que no se trata de un tratado vinculante bajo derecho internacional.
UNA REGIÓN MARCADA POR EL CONFLICTO
La zona fronteriza colombo-venezolana ha sido históricamente escenario de violencia. Según la ONG Insight Crime, operan en la región grupos armados como el ELN, disidencias de las FARC y el Tren de Aragua. Además, el Catatumbo —en Norte de Santander— es una de las áreas con mayor presencia de cultivos de coca en Colombia.
En enero de 2025, el enfrentamiento entre grupos ilegales provocó una crisis humanitaria con desplazamientos masivos. Paralelamente, la zona concentra buena parte del comercio bilateral: solo en los primeros cuatro meses de este año, Norte de Santander registró exportaciones por 161 millones de dólares, representando el 89% del comercio en la frontera, según la Cámara de Comercio Colombo-Venezolana.
UN GIRO EN LAS RELACIONES BILATERALES
Desde su llegada al poder en 2022, el presidente Petro ha trabajado por restablecer las relaciones diplomáticas con el Gobierno de Nicolás Maduro, rotas durante la administración de Iván Duque. Se reanudaron vuelos, tránsito fronterizo y se restableció el comercio bilateral.
No obstante, las tensiones persisten. Tras las cuestionadas elecciones venezolanas de 2024, Petro no reconoció oficialmente el triunfo del oficialismo, aunque luego envió un delegado a la ceremonia de investidura de Maduro.
En medio de este panorama, el mandatario colombiano reafirma su apuesta por la cooperación con Caracas, desestimando las críticas internas. “La humanidad solo ha sobrevivido ayudándose. Y la ayuda es entre familias y entre vecinos”, escribió recientemente.
🇨🇴🇻🇪A través de @MincomercioCo firmamos Memorando de Entendimiento para crear la Zona de Paz, Unión y Desarrollo entre Colombia y Venezuela.
Con esto estrechamos la cooperación entre ambos países en comercio, turismo, cultura, educación y salud. E impulsamos la producción de… pic.twitter.com/cpv3jGhcZj
— Presidencia Colombia 🇨🇴 (@infopresidencia) July 26, 2025