La policía estadounidense capturó a Vance Boelter, de 57 años, quien es apuntado como el principal sospechoso de disparar, el pasado 14 de junio, contra dos legisladores estatales de Minnesota y sus cónyuges y en esos ataques matar a una congresista y su esposo.
El hombre está acusado de provocar la muerte de la demócrata Melissa Hortman y de su esposo, Mark, al interior de su residencia.
Además, se le imputa el intento de asesinato contra el senador estatal John Hoffman y su esposa, Yvette, quienes sufrieron heridas de gravedad, también en su hogar.
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Indagaciones preliminares de la policía tras el tiroteo, sostienen que Boelter huyó a pie y dejó atrás un vehículo.
En el interior se encontró un cuaderno con los nombres de otros legisladores y posibles objetivos. Según dijo el domingo Drew Evans, jefe de la Oficina de Detención Criminal de Minnesota, no era un “manifiesto tradicional”.
Se sabe también que el sospechoso de matar a la congresista vestía un uniforme policial que se parecía tanto al auténtico que -según las autoridades- muchos civiles no habrían podido distinguirlo de uno real.
Boelter aparecía en la web de la empresa de seguridad privada Praetorian Guards Security Services como director de patrullas de la compañía.
Su detención se produjo en la localidad de Green Isle, a más de una hora al oeste de Mineápolis, tras más de 40 horas de búsqueda, precisaron las autoridades.
Estas habían ofrecido una recompensa de hasta 50.000 dólares por cualquier información que permitiera capturarlo.
Las autoridades continúan recabando indicios tendientes a esclarecer los motivos detrás del ataque. Mientras, la comunidad y los legisladores lamentan la tragedia y exigen respuestas ante la violencia que ha sacudido el ámbito político.
Líderes políticos y ciudadanos subrayaron la necesidad de reforzar la seguridad alrededor de los funcionarios públicos. Y también, de analizar con profundidad las circunstancias que permitieron que se llevara a cabo tan violento ataque.
ESTADO DE HOFFMAN
La esposa de John Hoffman, Yvette, dijo que su marido estaba “siendo sometido a muchas operaciones” tras el ataque, pero que “cada hora está más cerca de salir del peligro”, según un mensaje de texto que compartió en X (exTwitter) la senadora estadounidense Amy Klobuchar.
El legislador recibió nueve disparos y su pareja ocho, según el mensaje.
