Este domingo, el Papa Francisco hizo su primera aparición pública tras pasar 39 días en el Hospital Gemelli de Roma. El pontífice, de 88 años, apareció desde el balcón del hospital, saludando a los fieles y agradeciendo su apoyo. Con voz débil, expresó: «Gracias a todos, veo a la señora de las flores amarillas».
El Papa había estado luchando contra una neumonía bilateral desde el 14 de febrero, cuando fue ingresado en el hospital debido a una insuficiencia respiratoria grave.
Durante su hospitalización, sufrió dos episodios críticos, pero su condición mejoró lo suficiente como para que se le diera de alta este domingo. Su regreso al Vaticano marca el comienzo de un período de convalecencia de al menos dos meses.
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UNA RECUPERACIÓN EN PROCESO
Aunque fue dado de alta, el Papa Francisco no está completamente fuera de peligro. Según el médico del Vaticano, el Dr. Sergio Alfieri, el Papa continuará con terapias farmacológicas orales y deberá respetar un período de reposo.
«Este es un alta protegida», señaló Alfieri, quien también explicó que la voz del Papa, aunque mejorada, sigue siendo una de las áreas más afectadas por el cuadro de salud.
El pontífice agradeció el cuidado recibido durante su hospitalización, y destacó el «cuidado y la esperanza de los familiares de los enfermos». El Papa también mencionó que durante este tiempo, experimentó la «paciencia del Señor», reflejada en la dedicación de los médicos y el personal sanitario que lo atendió.
Adicionalmente, el doctor Luigi Carbone, vicedirector del servicio de salud del Vaticano, informó que aunque la neumonía bilateral ha desaparecido, el Papa aún está en proceso de recuperación de otras infecciones.
El pontífice continuará su tratamiento y fisioterapia en la Casa Santa Marta. Allí residirá durante los próximos dos meses, evitando reuniones con grandes multitudes para favorecer su plena recuperación.
Durante su hospitalización, el Papa requirió ventilación mecánica no invasiva y oxígeno. Sin embargo, los médicos se muestran optimistas sobre su evolución y aseguran que el pontífice sigue con buen ánimo.
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