Familiares de los israelíes secuestrados en la Franja de Gaza protestaron una vez más contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, al que exigieron que acepte el acuerdo de alto el fuego y la liberación por fases que ya aprobó el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).
Einav Zangauker, una de las voces más beligerantes contra Netanyahu según Europa Press, dijo durante un acto desarrollado en Tel Aviv que “si Netanyahu firma este acuerdo este mismo domingo podríamos estar negociando la vuelta del resto de los rehenes a cambio del fin de la guerra”.
“Si comienza la conquista de la ciudad de Gaza, no habrá acuerdo”, advirtió y acusó al primer ministro de “poner obstáculos (al acuerdo) y culpar a Hamas” mientras planifica la toma de la principal ciudad del enclave palestino.
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Por otra parte, Yehuda Cohen, padre del militar secuestrado Nimrod Cohen, apeló al presidente estadounidense, Donald Trump, para que presione a Netanyahu para que firme un acuerdo que ponga fin a la guerra y permita liberar a todos los rehenes.
“Este es el momento. Se perderán más vidas y nuestros seres queridos morirán” si no hay acuerdo, advirtió.
La manifestación no fue solo en el centro de la capital de Israel. También hubo protestas frente al domicilio de líder del partido ultraderechista Poder Judío y ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, al que acusan de “torpedear el acuerdo”.
NEGOCIACIONES ENTRAMPADAS
Las demostraciones se han multiplicado.
El domingo pasado los familiares reunieron a aproximadamente un millón de personas en las protestas -500 mil solo en Tel Aviv-, coincidiendo con una huelga general de carácter informal para exigir un acuerdo con Hamas para la liberación de los rehenes.
El lunes, a través de un breve comunicado recogido por el diario ‘Filastín’, afín al grupo, el Movimiento de Resistencia Islámica comunicó que aceptaba la propuesta de alto el fuego presentada por los mediadores, Qatar y Egipto.
Sin embargo, el Gobierno israelí insiste en que Hamas debe liberar inmediatamente a todos los secuestrados, vivos o muertos, que tienen en su poder las milicias palestinas.
Además exige su desarme inmediato, la desmilitarización de la Franja, el control israelí del perímetro del enclave y la instauración de un gobierno ajeno a Hamás y a la Autoridad Palestina que “conviva en paz con Israel”.
