DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) ya ha provocado sus primeros efectos en las provincias de Tarragona y Barcelona.
En esta última, las intensas lluvias han generado inundaciones tanto en diversas carreteras como en el aeropuerto de El Prat.
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Además, la emergencia ha llevado a la suspensión del servicio de Cercanías (Rodalies), así como de vuelos de salida y llegada.
PROTECCIÓN CIVIL
Protección Civil de la Generalitat ha advertido sobre las «lluvias constantes y torrenciales» desde temprano en la mañana del 4 de noviembre, siendo las áreas más afectadas las comarcas del Barcelonès, Baix Llobregat y Maresme.
En respuesta, el Ayuntamiento de Barcelona ha activado un comité de emergencias para coordinar los esfuerzos de respuesta.
Universidades como la de Barcelona y la Autónoma de Barcelona han suspendido sus clases debido a las condiciones meteorológicas adversas.
INUNDACIONES EN EL AEROPUERTO DE BARCELONA
El aeropuerto de Barcelona-El Prat ha sido uno de los puntos más afectados, con cerca de 70 vuelos cancelados y 18 desvíos hasta el mediodía.
Las inundaciones en la Terminal 1 y en áreas de estacionamiento han agravado la situación, y las autoridades recomiendan a los pasajeros mantenerse informados sobre el estado de sus vuelos y evitar desplazamientos innecesarios.
Además, el servicio de Rodalies se ha visto interrumpido, afectando a miles de usuarios que han tenido que buscar alternativas de transporte. El ministro de Transportes, Óscar Puente, informó sobre la interrupción temporal de los trenes de alta velocidad en el túnel de El Prat de Llobregat, donde el agua alcanzó niveles críticos.
INTENSAS PRECIPITACIONES
Desde la madrugada del último martes, la ciudad de Barcelona ha recibido intensas precipitaciones que han superado los 100 litros por metro cuadrado en algunas áreas.
Las autoridades han emitido recomendaciones para evitar desplazamientos, mientras los servicios de emergencia trabajan en atender las situaciones generadas por la tormenta.
Las lluvias también han causado deslaves el martes pasado, resultando en al menos 217 víctimas fatales: 213 en Valencia, tres en Castilla-La Mancha y una en Andalucía.
Se advierte que la cifra de fallecidos podría aumentar debido al número incierto de desaparecidos.
