Este domingo 13 de octubre se registró un ataque con dron en los alrededores de la ciudad de Binyamina, en la zona norte de Israel, que dejó a cerca de 67 personas heridas, cuatro de ellas en estado crítico y otras cinco estarían gravemente heridas.
Según informó el medio israelí Maariv, el ataque fue adjudicado por el movimiento libanés Hezbolá en respuesta a los ataques perpetrados en Beirut.
Durante la celebración del Yom Kippur, se habían activado las alarmas en varias ciudades del país por la detección de 320 proyectiles lanzados desde el Líbano contra grupos y cuarteles militares.
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Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que durante su incursión en el sur del Líbano hubo un disparo masivo de misiles antitanques en contra de las tropas.
En aquel enfrentamiento dos soldados israelíes resultaron gravemente heridos, mientras otros sufrieron heridas moderadas. Aseguran que durante el suceso dos tanques retrocedieron hacia la posición de la misión de paz de la ONU en la zona, conocida como FINUL, para evacuar a los heridos.
Por su parte, el grupo Hezbolá señaló que durante el sábado perpetraron varios ataques en contra del Estado sionista y contra un grupo de militares.
