Internacional

México advierte a Perú que ingresar a embajada es ilegal

Editado de agencias y medios internacionales por Cristian Navarro H.

Periodista

México
Foto: Publicado en X por @roro_asesino
El viernes pasado, la Justicia peruana emitió una orden de captura internacional y prisión preventiva por cinco meses contra Betssy Chávez

El presidente interino de Perú, José Jerí, abrió un nuevo capítulo en la ya compleja crisis diplomática con México al afirmar que, si es necesario, su Gobierno podría ingresar a la Embajada mexicana en Lima para detener a la exprimera ministra Betssy Chávez, procesada por su rol en el fallido golpe de Estado del expresidente Pedro Castillo.

“Si se tiene que ingresar a la Embajada mexicana, se hará”, declaró Jerí al diario El Comercio, deslizando la posibilidad más extrema en un conflicto que mantiene a Chávez refugiada desde hace casi tres semanas en la sede diplomática, tras recibir asilo político por parte de México. La exministra permanece a la espera de que Perú otorgue un salvoconducto que le permita viajar al país norteamericano.

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MÉXICO ADVIERTE: “SERÍA UNA VIOLACIÓN GRAVE DEL DERECHO INTERNACIONAL”

Las palabras del mandatario peruano provocaron una inmediata respuesta desde Ciudad de México. La presidenta Claudia Sheinbaum advirtió este lunes que un eventual ingreso de fuerzas de seguridad peruanas en la embajada constituiría una violación del derecho internacional y de la inviolabilidad diplomática.

“Una intervención en la embajada estaría fuera de toda norma”, afirmó la mandataria mexicana, subrayando que Chávez tiene un “derecho de asilo reconocido por las leyes internacionales de derechos humanos”, cuya vulneración “sería muy grave”.

La cancillería mexicana aseguró, además, haber recibido garantías de que la sede diplomática no será intervenida, pese a las declaraciones de Jerí.

UNA ORDEN DE CAPTURA QUE ELEVA LA PRESIÓN

El viernes pasado, la Justicia peruana emitió una orden de captura internacional y prisión preventiva por cinco meses contra Chávez, al considerar “palpable” el peligro de fuga por su inasistencia a controles biométricos y audiencias judiciales.

Jerí reconoció que su Gobierno aún evalúa los próximos pasos: “Vamos a meditar y mucho. Toda acción debe pensarse conforme a las limitaciones y compromisos internacionales que tenemos”. Además, aseguró estar “abierto a todo tipo de posibilidades”.

Consultado por la reacción de otros países, como la advertencia del presidente colombiano Gustavo Petro, quien dijo que retiraría su embajada si Perú “agrede” la sede mexicana, Jerí respondió: “A palabras necias, oídos sordos”.

El presidente interino insistió en que “no le tiembla la mano” para tomar decisiones difíciles: “Tendré 39 años, pero sé lo que tengo que hacer y lo medito bien. No tengo ningún tipo de temor”.

UN FRENTE POLÍTICO DIVIDIDO EN LIMA

Las declaraciones de Jerí contrastan con la postura del primer ministro peruano, Ernesto Álvarez, quien sostuvo que el país “es respetuoso del derecho internacional” y de la inmunidad de las sedes diplomáticas. Una señal de disenso interno en un momento de alta tensión.

La crisis estalló tras la decisión de Perú de romper relaciones con México el 3 de noviembre, acusando a ese país de injerencia al otorgar asilo a Chávez. El escenario evoca el quiebre diplomático ocurrido en 2024 entre México y Ecuador, cuando fuerzas ecuatorianas irrumpieron en la embajada mexicana en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas.

UNA CRISIS SIN SEÑALES DE DESESCALADA

Mientras Chávez continúa dentro de la embajada y México insiste en el diálogo como única vía, en Lima crecen las interrogantes sobre hasta dónde está dispuesto a llegar el Gobierno de Jerí.

Por ahora, la tensión se mantiene abierta y sin señales claras de desescalada, en un conflicto que podría escalar hacia un incidente diplomático mayor en la región.

 

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