El hallazgo de restos humanos, ropa calcinada y posibles hornos crematorios en un rancho del estado de Jalisco ha sacudido a México. La indignación ciudadana ha puesto en el centro del debate público una deuda histórica: la crisis de personas desaparecidas. Y aunque Claudia Sheinbaum goza aún de altos niveles de aprobación, este escándalo representa el primer gran reto social de su mandato presidencial.
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La presidenta ha reiterado que el caso «no será su talón de Aquiles», desmarcándose de las críticas que señalan falta de acción. Asegura que no se ocultará información y promete justicia. A su vez, ha adelantado reformas para fortalecer la Comisión Nacional de Búsqueda y la creación de una base de datos unificada de personas desaparecidas, que será presentada el 24 de marzo.
UN HALLAZGO QUE SACUDE A LA NACIÓN
El pasado 8 de marzo, colectivos de búsqueda hallaron huesos calcinados, casquillos de bala, altares a la Santa Muerte y más de 400 pares de zapatos abandonados en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco. Las imágenes difundidas por los buscadores helaron a la opinión pública. Según los colectivos, el predio no solo servía como campo de entrenamiento del crimen organizado, sino como «campo de exterminio», presuntamente del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Por su parte, el Gobierno federal ha sido más cauto, limitando sus declaraciones al uso del lugar como centro de adiestramiento criminal. Esta diferencia en las versiones ha encendido las alarmas entre defensores de derechos humanos, quienes temen que se minimice la magnitud de lo descubierto.
TENSIÓN ENTRE NARRATIVA OFICIAL Y EXIGENCIA SOCIAL
El fiscal general, Alejandro Gertz Manero, presentó un primer informe técnico sobre el caso, en el que reconoció omisiones en la investigación estatal y se comprometió a esclarecer los hechos. La presidenta Sheinbaum también ha presionado para que la Fiscalía General de la República atraiga el caso, cuestionando el papel de las autoridades locales.
Sin embargo, en los días siguientes, su postura ha mostrado señales de ambigüedad. Si bien en un principio se solidarizó con las familias, posteriormente puso en duda algunas cifras de desaparecidos, incluyendo las mencionadas por el Episcopado mexicano, que denunció un incremento del 40% en las desapariciones desde que inició su mandato. “No tienen la información correcta”, respondió la mandataria.
Además, Sheinbaum ha defendido a su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, frente a acusaciones en redes sociales que lo vinculan con el narcotráfico. «Ya déjenlo en paz», expresó, subrayando que no se deben repetir los errores de gobiernos anteriores.
CRÍTICAS DESDE LA SOCIEDAD CIVIL
Organizaciones como el Centro Prodh, Amnistía Internacional y Human Rights Watch han cuestionado el enfoque del Gobierno. Advierten que reducir el Rancho Izaguirre a un simple campo de entrenamiento podría obstaculizar investigaciones clave sobre desapariciones forzadas.
Mientras tanto, los familiares de desaparecidos siguen esperando respuestas. El 20 de marzo, fueron autorizados a entrar al rancho, pero muchos denunciaron que los objetos encontrados originalmente ya no estaban ahí, pues habían sido retirados por las autoridades para análisis forenses.
«Encontré dolor, lágrimas… pero no a mi esposo», lamentó una mujer frente al portón del rancho.
“PRESIDENTA, ¿AHORA SÍ NOS VE?”
El 15 de marzo, ciudadanos se reunieron en el Zócalo capitalino con 400 pares de zapatos, símbolo de las víctimas sin nombre. Entre velas y mensajes de solidaridad, un reclamo resonó con fuerza: «Presidenta, ¿ahora sí nos ve?»
Sheinbaum, quien prometió no construir una «verdad histórica» como ocurrió con Ayotzinapa, ha dicho que no habrá impunidad. Sin embargo, el país observa con atención si el caso del Rancho Izaguirre marcará un antes y un después en la lucha contra la desaparición forzada en México.
🗣️“Nuestra molestia es que nos trajeron a ver un circo y esto es una burla para nuestro dolor”, sentenció Patricia Sotelo, madre buscadora, quien acudió a la apertura del rancho en #Teuchitlán, Jalisco.https://t.co/cV47k66dGW
— Animal Político (@Pajaropolitico) March 21, 2025
