Miles de manifestantes se congregaron en las calles de Damasco y otras ciudades sirias para exigir una transición política que garantice derechos, unidad nacional y participación igualitaria, en un contexto de profunda incertidumbre tras la caída de Bashar al-Assad.
Con carteles que llevaban mensajes como «El pueblo sirio está unido», la multitud recorrió lugares emblemáticos como la Plaza de los Omeyas, epicentro de las protestas desde el derrocamiento de al-Assad el 8 de diciembre.
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Los manifestantes exigieron un Estado laico, una nueva Constitución y la inclusión de mujeres y comunidades religiosas y étnicas en el proceso de transición.
CONTEXTO DE LAS MANIFESTACIONES
Las protestas se producen mientras la región enfrenta tensiones crecientes tras la salida de al-Assad, derrocado por fuerzas rebeldes antigubernamentales, incluidas antiguas facciones de Al-Qaeda.
En este clima, los líderes europeos han instalado a evaluar medidas de apoyo para estabilizar Siria.
Además, el Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció el refuerzo de sus tropas en la región, elevando la cifra a 2.000 efectivos, en un gesto de respaldo a la lucha contra el grupo Estado Islámico.
REACCIONES INTERNACIONALES
El secretario general de la ONU, António Guterres, subrayó la importancia de una transición «inclusiva, creíble y pacífica». Desde su perfil en la red social X, destacó que Siria enfrenta una oportunidad histórica para avanzar en justicia social y reconciliación, condenando a su vez ataques israelíes en el territorio sirio como violaciones a la soberanía.
LIDERAZGO INTERNO VISIÓN Y CONCILIADORA
Ahmed Al-Sharaa, conocido como Abu Mohammed al-Jolani, líder de facto del país, adoptó un tono conciliador al referirse a la transición como una oportunidad para la paz.
Este período de cambio llega tras años de conflicto, con la esperanza de construir un futuro más equitativo y representativo para todos los sirios.
Las demandas de igualdad de género y la participación activa de mujeres y niñas en el proceso político fueron destacadas tanto en las manifestaciones como en el llamado de Guterres a una transición inclusiva que respeta los derechos fundamentales.
Mientras tanto, el pueblo sirio continúa enfrentando desafíos significativos, pero con esperanzas renovadas de estabilidad y unidad en esta etapa crucial de su historia.
The people of Syria stand at a moment of history – and a moment of opportunity.
The political transition ahead must be by Syrians, and for Syrians – all Syrians.
It must be inclusive, credible and peaceful.All communities must be fully integrated into the new Syria.
— António Guterres (@antonioguterres) December 19, 2024
