Este viernes, los ministros de Exteriores de Francia y Alemania realizaron una visita sin precedentes a las inmediaciones de la cárcel de Sednaya, en Siria, lugar denominado como «una fábrica de muerte» por organizaciones de derechos humanos.
La prisión, ubicada a 30 kilómetros al norte de Damasco, se conoce por su papel en la represión brutal de opositores al régimen de Bashar al Assad desde el inicio de la guerra civil siria en 2011.
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Durante la visita, los ministros Jean-Noël Barrot y Annalena Baerbock destacaron la necesidad de justicia y rendición de cuentas para las víctimas de las atrocidades documentadas en este centro de detención.
Según informes de Amnistía Internacional, Sednaya fue escenario de ejecuciones masivas, torturas y desapariciones forzadas, prácticas que el régimen niega categóricamente.
REUNIÓN CON ACTUAL LÍDER SIRIO
Los ministros de Francia y Alemania viajaron a Damasco como representantes de Bruselas en una visita que les llevará a reunirse con el actual líder sirio, el yihadista Ahmed Husein al Shara, también conocido como Abú Mohamed al Golani.
Dicho encuentro tuvo por objetivo recordar que el respeto a los civiles y a las minorías será un factor primordial para entablar cualquier tipo de relación futura, según informó la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Kaja Kallas.
«Nuestro mensaje a los nuevos líderes de Siria: el respeto a los principios acordados con los actores regionales y las garantías de protección a los civiles y a las minorías son factores de importancia primordial», señaló.
