El empresario Elon Musk reconoció este miércoles que algunas de sus publicaciones recientes contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, “fueron demasiado lejos”.
A través de su cuenta en X (antes Twitter), red social de su propiedad, el magnate sudafricano expresó su arrepentimiento por los mensajes que encendieron una disputa pública entre ambos, luego de años de colaboración cercana.
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“Lamento algunas de mis publicaciones sobre el presidente @realDonaldTrump de la semana pasada. Fueron demasiado lejos”, escribió Musk, intentando poner paños fríos a una controversia que ha escalado rápidamente en los últimos días.
I regret some of my posts about President @realDonaldTrump last week. They went too far.
— Elon Musk (@elonmusk) June 11, 2025
PUNTO DE QUIEBRE
Hasta hace poco, Musk y Trump mantenían una relación que se describía como amistosa. El fundador de Tesla incluso donó 250 millones de dólares para la campaña presidencial del republicano y llegó a formar parte del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).
Sin embargo, su renuncia a ese organismo marcó el inicio de una serie de ataques desde X hacia el exmandatario.
El punto de quiebre se produjo cuando Musk acusó a Trump de encubrir la llamada “lista de Jeffrey Epstein”, insinuando que su nombre aparecía entre los contactos del fallecido delincuente sexual. Aunque el mensaje fue eliminado horas después, la declaración generó un impacto mediático inmediato.
Trump respondió y aseguró que Musk “perdió la cabeza” y amenazó con revisar los contratos que sus empresas mantienen con el gobierno federal.
Según The New York Times, las compañías de Musk —incluyendo SpaceX y Tesla— poseen cerca de 100 contratos con 17 agencias, entre ellas la NASA y el Departamento de Defensa, por un valor que podría superar los 3.000 millones de dólares.
Además, la cotización bursátil de Tesla se ha visto severamente afectada por la disputa, con una caída del 14% en la última semana y una pérdida de más de 152 mil millones de dólares en valor de mercado.
Según JP Morgan, la empresa podría dejar de ingresar 1.200 millones anuales si se aprueba el megaproyecto fiscal impulsado por Trump.