Un nuevo ataque de Israel en Gaza eleva la cifra de muertos a 62.700 personas desde el inicio de la contraofensiva.
En esta jornada de sábado, más de 60 gazatíes perdieron la vida según consignó El Ministerio de Sanidad de Gaza. Este organismo precisó que “varías víctimas permanecen bajo los escombros y en las calles. Ello, ya que las ambulancias y los equipos de defensa no pueden llegar a ellas”.
La cifra puede aumentar
«Varias víctimas permanecen bajo los escombros y en las calles, ya que las ambulancias y los equipos de defensa civil no pueden llegar a ellas en este momento», detalló el ministerio en el comunicado, en el que dijo que unas 280 personas resultaron también heridas el sábado.
La morgue del Hospital Naser, en la sureña urbe de Jan Yunis, recibió ayer un total de 30 cadáveres. De acuerdo a una fuente de este centro, eso demuestra la intensidad de los bombardeos en este área donde se aglutina gran población local.
Fue en la región de Jan Yunis donde Israel centró ayer los bombardeos. Estos también habrían afectado tiendas de campaña en la ciudad de Asdaa.
Luz verde para disparar
Allí habrían muerto otras 17 personas, incluidos 6 niños. Según una fuente del Hospital Naser, todos con edades entre los seis meses y los 13 años.
Estos sucesos bélicos se repiten a diario, ya que una organización respaldada por EE.UU. e Israel reparte alimento en complejos militarizados.
Las tropas israelíes están apostadas a apenas dos kilómetros. Según reveló una investigación reciente de Haaretz, con luz verde para disparar hacia quienes intentan apropiarse indebidamente de la ayuda.
Piden negociar
Estos ataques se producen en medio de la ofensiva de familiares de víctimas de Israel para obligar a su gobierno a aceptar la negociación con Hamas.
En esa línea, El exministro de Defensa israelí, Benny Gantz, pidió el sábado al primer ministro Benjamín Netanyahu forjar un gobierno de unidad junto a miembros de la oposición con el fin de lograr la liberación de los rehenes en Gaza.
