El presidente Javier Milei lanzó un ambicioso paquete de medidas para incentivar el uso de los dólares que los ciudadanos mantienen fuera del sistema financiero formal. Milei busca así fortalecer las golpeadas reservas internacionales del país, apelando a la confianza de los argentinos en su nueva política económica.
Durante décadas, el efectivo guardado en colchones o cajas fuertes ha sido una estrategia común ante la incertidumbre financiera. Esta práctica, profundamente arraigada, se traduce en una vasta masa de divisas no declaradas: según el INDEC, se calcula que hay unos 271.000 millones de dólares fuera del circuito bancario legal.
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El jueves, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que se flexibilizarán los requisitos para declarar divisas. “Es un cambio de régimen que permite a la gente usar sus dólares sin ser perseguida”, afirmó. Entre las medidas, destaca que los ciudadanos podrán utilizar dólares sin tener que justificar su origen, lo que elimina trabas fiscales y legales que hasta ahora los desincentivaban.
MENOS CONTROL FISCAL, MÁS INCENTIVO AL USO
Una de las principales novedades es el aumento del umbral a partir del cual los bancos y comercios deben reportar operaciones al fisco. Esto permitirá que más personas usen sus ahorros en dólares sin riesgo de ser objeto de investigación tributaria. Además, se eliminarán declaraciones juradas sobre capacidad patrimonial para realizar ciertas operaciones.
Las medidas se implementarán inicialmente por decreto presidencial, aunque el Ejecutivo espera que el Congreso las ratifique para darles carácter permanente.
“MONETIZAR” RESERVAS OCULTAS
Milei ha insistido en que parte de la solución a la escasez de reservas pasa por “monetizar” los dólares que los propios argentinos han guardado fuera del sistema. Esta “reserva clandestina” sería, incluso, más de diez veces mayor que el acuerdo de 20.000 millones de dólares que el país negocia con el FMI.
Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional ya advirtió que cualquier nuevo esquema debe cumplir con los estándares globales contra el lavado de dinero.
Aun así, persiste la duda de si los argentinos confiarán en este nuevo modelo. El recuerdo de amnistías fiscales revocadas en gobiernos anteriores, que terminaron en impuestos no previstos, sigue pesando sobre quienes hoy guardan sus ahorros en la sombra.
▶️ ESTALLA EL SECTOR PRIVADO APLAUDIENDO A TOTO@LuisCaputoAR: “Con crecimiento y fomentando la formalización, la baja de impuestos va a sorprender. Nosotros vinimos a bajar impuestos y a desregular. El superávit que tengamos, lo vamos a destinar a bajar impuestos para que… pic.twitter.com/fs5UXOXWWS
— Agustin Pistone (@agustin_pistone) May 23, 2025