En el contexto del caso de trata y tráfico de personas que enfrenta Evo Morales, Cindy V., una presunta víctima, denunció haber sido obligada a abandonar Bolivia junto a su hija. Acusó al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y a la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, de estar involucrados en amenazas y encubrimientos.
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DENUNCIAS CONTRA EVO MORALES
Cindy V., quien mantuvo su identidad bajo reserva, afirmó ser madre de una hija de Morales, producto de una relación iniciada cuando era menor de edad. Según su testimonio, ha sido perseguida por el gobierno boliviano, acusando a las autoridades de usar su caso con multas políticas.
«Estoy en peligro. Escapo de la persecución del Gobierno de Arce, de la Policía y de la Fiscalía. Soy la víctima», expresó en una entrevista con DNews .
Morales, citado nuevamente por la justicia, se enfrentará a una audiencia de medidas cautelares el 14 de enero de 2025, donde se decidirá si afrontará el proceso en libertad o bajo detención preventiva.
ACUSACIONES DE MANIPULACIÓN Y AMENAZAS
Cindy afirmó que el caso fue «armado» por las autoridades: «Ellos involucraron a mi familia con mentiras y amenazas, poniendo en riesgo la vida de mi hija».
También aseguró que su denuncia original, realizada en 2017, no recibió atención y desencadenó una persecución que ha puesto en peligro a su familia.
Según su relato, las autoridades buscaron anular el registro civil de su hija, registrado en 2017, utilizando amenazas. «Decidimos callar por miedo a las represalias, pero en 2019 fuimos obligados a salir del país», agregó.
SEÑALAMIENTOS DIRECTOS A FUNCIONARIOS
Cindy acusó directamente al ministro Eduardo del Castillo de gestionar su salida forzosa a Argentina y de encabezar un operativo de trata y tráfico.
También denunció la complicidad de la fiscal Sandra Gutiérrez, señalando que ambos conocían personalmente a su hija. «Es inaceptable que quienes participen en el encubrimiento ahora digan buscar justicia», declaró.
CONTEXTO Y EVOLUCIÓN DEL CASO
El caso que involucra a Evo Morales incluye acusación de abuso y estupro. La hija de Cindy habría nacido en 2016, cuando ella era menor de edad. A pesar de las denuncias, Cindy sostiene que el proceso está lleno de irregularidades y pruebas fabricadas, incluyendo acusaciones falsas de múltiples viajes al extranjero.
La audiencia de Morales en Tarija será crucial para determinar si enfrentará los cargos en prisión preventiva. Mientras tanto, Cindy insiste en que su prioridad es proteger la vida de su hija y buscar justicia real, denunciando las acciones de un sistema que considera cómplice.
IMPACTO Y DECLARACIONES FINALES
Cindy concluyó lamentando la falta de justicia y el impacto de este caso en su vida: «Me han quitado todo: trabajo, educación, libertad. Solo intento proteger a mi hija de un sistema que busca silenciarme».
Víctima de Evo Morales: «Nos veíamos dos veces por semana… Temo por mi vida» ¿Qué dirán los maduristas? pic.twitter.com/UBeLnjHJW2
— Javier Vivas Santana (@vivassantanaj_) October 11, 2024