Internacional

Qué esperar del 1 de agosto con los aranceles de Trump

Editado de agencias y medios internacionales por Cristian Navarro H.

Periodista

Trump
Foto: Publicado en X por @WhiteHouse
En América Latina la mayoría de los países enfrentan aranceles del 10%.

Este 1 de agosto, entran en vigor los nuevos aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a una extensa lista de países. Mientras algunos gobiernos corren contrarreloj para sellar acuerdos comerciales que atenúen el impacto, otros ya han cedido a la presión firmando pactos bilaterales. Trump lo ha calificado como “¡un gran día para Estados Unidos!”, pero ¿significa esto el cierre definitivo de su guerra comercial?

Desde el inicio de su segundo mandato, Trump ha utilizado los aranceles como herramienta de presión política, económica e incluso judicial. Aunque hasta ahora los gravámenes habían servido como amenaza para negociar, la Casa Blanca confirmó que el 1 de agosto es una fecha definitiva e inamovible. La estrategia aprovecha la fuerte dependencia que muchas economías tienen del mercado estadounidense, permitiendo a Washington aplicar tarifas de entre 10% y 50% según el país.

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ASIA: ACUERDOS CON CONCESIONES ASIMÉTRICAS

Vietnam, Indonesia, Filipinas y Japón han firmado acuerdos que les garantizan acceso al mercado estadounidense, pero bajo condiciones estrictas. Vietnam, por ejemplo, aceptó un 20% de arancel sobre sus exportaciones y un 40% en productos transbordados, a cambio de permitir un acceso total a sus mercados. Japón redujo su arancel a 15% tras comprometerse a abrir su mercado automotriz e invertir 550.000 millones de dólares en EE. UU.

India, en cambio, quedó bajo un régimen más duro: enfrentará un 25% de aranceles más penalizaciones por su relación con Rusia. En Corea del Sur, el pacto incluyó compromisos de inversión por 350.000 millones de dólares y la compra de energía estadounidense, lo que redujo sus aranceles al 15%. Con Taiwán, las negociaciones avanzan, pero aún no hay un pacto formal.

CHINA: UNA TREGUA PENDIENTE

El frente con China sigue siendo el más delicado. Aunque ambas potencias acordaron reducir mutuamente sus aranceles del 145% al 30% (EE. UU.) y del 125% al 10% (China), la tregua aún no está completamente consolidada. La fecha límite para alcanzar un acuerdo definitivo es el 12 de agosto. Mientras tanto, se mantienen aranceles elevados y restricciones mutuas, aunque con algunas concesiones en exportaciones estratégicas como las tierras raras.

EUROPA: CONCESIONES BAJO PRESIÓN

El Reino Unido selló un acuerdo en mayo, manteniendo un arancel del 10% pero rebajando gravámenes previos al acero y al aluminio. La Unión Europea, tras intensas negociaciones, acordó un arancel del 15% y prometió compras energéticas por 750.000 millones de dólares, más inversiones adicionales. Sin embargo, algunos países como Francia han criticado duramente el pacto, considerándolo desequilibrado y una rendición frente al chantaje económico de Trump.

AMÉRICA LATINA: EL CASO MÁS TENSO, BRASIL

En la región, la mayoría de los países enfrentan aranceles del 10%. No obstante, Brasil es la gran excepción: enfrentará un gravamen del 50%, luego de que Trump sancionara al país por las acciones judiciales contra el expresidente Jair Bolsonaro, su aliado. El presidente Lula da Silva respondió con una medida recíproca y denunció la interferencia estadounidense como “inaceptable”.

En contraste, México logró una prórroga de 90 días en sus negociaciones. Seguirá enfrentando aranceles del 25% al fentanilo y los automóviles, y del 50% al acero, aluminio y cobre, mientras se avanza hacia un acuerdo comercial. Canadá, por su parte, aún intenta cerrar un pacto, pero las autoridades admiten que es improbable lograrlo antes del 1 de agosto.

Chile recibió una buena noticia: sus exportaciones de cobre metálico quedaron exentas de los nuevos aranceles del 50% aplicados a productos semifacturados, protegiendo un sector clave de su economía.

RUSIA: ARANCELES CONDICIONADOS A LA PAZ

La política arancelaria hacia Rusia está directamente ligada al conflicto en Ucrania. Trump advirtió que, si Moscú no alcanza un acuerdo de paz con Kiev en los próximos días, se aplicarán aranceles secundarios del 100% a entidades que comercien con el Kremlin.

UNA ESTRATEGIA CON MÚLTIPLES FRENTES

La guerra comercial de Trump ya no solo apunta a equilibrar la balanza comercial de EE. UU., sino también a imponer condiciones políticas. Desde el caso judicial de Bolsonaro hasta las relaciones de India con Rusia, el mandatario ha ampliado el alcance de sus sanciones. Aún con varios acuerdos en marcha, el escenario global sigue siendo volátil y la incertidumbre persiste. ¿Termina el 1 de agosto la guerra arancelaria o solo entra en una nueva fase?

 

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