Emanuela Orlandi, una adolescente de 15 años ciudadana del Vaticano, desapareció el 22 de junio de 1983 en Roma, en un caso que ha intrigado al mundo por más de cuatro décadas.
Orlandi, era la hija de un empleado de la Prefectura de la Casa Pontificia y no hubo más rastro de ella luego de que asistiera a una clase de música en la ciudad.
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Las teorías abarcan desde conspiraciones vaticanas y vínculos con la mafia hasta chantajes contra la Santa Sede. A pesar de las múltiples investigaciones y pistas, su paradero sigue siendo desconocido.
En 2023, el Vaticano anunció una nueva investigación oficial, renovando la esperanza de respuestas para una de las desapariciones más misteriosas de Italia.
REVELACIÓN DE UN INFORME
El promotor de justicia del Vaticano, Alessandro Diddi, confirmó la existencia de un informe confidencial a 41 años del hecho.
Según declaraciones por parte de la familia de Orlandi a distintos medios italianos, han solicitado ver el expediente «desde el 2017», a pesar de que la investigación en el Vaticano se abrió en el 2023, seis años después.
Hasta ahora, la Santa Sede había negado la existencia de este informe confidencial, que recopila información clave recogida sobre la desaparición de Emanuela Orlandi.
DECLARACIONES DEL HERMANO DE EMANUELA
Tras la revelación del informe, el hermano de la joven desaparecida, Pietro Orlandi, confirmó durante décadas de la existencia de este documento en manos del Vaticano, que podría aportar una reconstrucción histórica que ayudaría a esclarecer lo ocurrido.
En ese sentido, aseguró en más de una ocasión que el culpable de la muerte de su hermana es Paolo Gabriele, el que fuera “mayordomo” de Benedicto XVI y figura clave del caso ‘Vatileaks’.
Sin embargo, a pesar de la filtración de la existencia del informe, Diddi declaró que no está autorizado para divulgar el contenido de esos archivos ni identificar su autoría hasta que se concluya la investigación.