Las protestas de seguidores de Evo Morales, que comenzaron como una medida de apoyo al expresidente investigado por trata de personas y estupro, han escalado en intensidad y exigencias.
Ahora, los manifestantes piden la renuncia del presidente Luis Arce o el adelanto de las elecciones, mientras los bloqueos de carreteras continúan afectando la distribución de productos y combustible en el país.
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Desde hace nueve días, organizaciones sociales afines a Morales mantienen cortes de rutas en distintas partes de Bolivia, incluidos la región del Trópico de Cochabamba y las conexiones entre Oruro, Potosí y Santa Cruz.
BLOQUEOS HAN GENERADO UNA SEVERA ESCASEZ
Los bloqueos han generado una severa escasez de combustible y alimentos, provocando alzas de precios y afectando a la población en varias ciudades.
La tensión ha aumentado con la intervención de dirigentes como el diputado Gualberto Arispe, quien afirmó que Arce «tiene dos caminos: adelantar las elecciones o renunciar».
En la misma línea, el dirigente campesino Ponciano Colque aseguró que ya no existe posibilidad de diálogo con el gobierno y que las protestas continuarán hasta que se convoquen elecciones anticipadas.
El gobierno había intentado negociar con Morales antes del inicio de los bloqueos, invitándolo a dialogar con el presidente Arce, pero la oferta fue rechazada.
CONDICIONAN DIALOGOS A FIN DE PROCESOS JUDICIALES CONTRA EVO
Los manifestantes ahora condicionan cualquier posibilidad de diálogo a que se levanten los procesos judiciales contra Evo Morales y se deroguen ciertos decretos sobre el uso de tierras para la agricultura.
En tanto, las autoridades han intervenido algunos puntos de bloqueo, pero en muchos casos, los manifestantes han retomado el control de las rutas horas después.
Esta situación ha llevado a que varios camiones queden varados y que se agrave la crisis de abastecimiento en diversas regiones.
El gobierno, a través de la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, ha sostenido que las protestas tienen un trasfondo político, centrado en buscar la impunidad de Morales y garantizar su candidatura para las elecciones de 2025, en una disputa interna por el liderazgo del Movimiento al Socialismo (MAS).
Sin embargo, la creciente presión de los manifestantes y el impacto de los bloqueos complican el panorama político para la administración de Arce.
#Política | El diputado de #MAS «arcista» Froilan Mamani, les dice a los legisladores «evistas» que dejen gobernar a Luis Arce y que en lugar de pedir ahora su renuncia den propuestas que beneficie a la población y asistan a dialogar. pic.twitter.com/XMmyYmDztd
— Contacto Bolivia (@ContBolivia) October 21, 2024