Al menos 70 personas han muerto en las últimas 48 horas en el estado de Jartum, la capital de Sudán, a causa de un violento brote de cólera que se expande rápidamente en un país asolado por más de dos años de guerra civil entre el Ejército y las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
Este enfrentamiento ha desplazado a millones de personas, creando condiciones ideales para la propagación de enfermedades como el cólera.
Según el Ministerio de Salud de Sudán, se han registrado 2.119 casos en solo dos días, con 942 nuevas infecciones y 25 muertes el miércoles, y 1.177 casos y 45 fallecidos el martes. El brote se desató tras semanas de intensos bombardeos con drones, que destruyeron infraestructura clave, como plantas de tratamiento de agua y centrales eléctricas.
Pese al alarmante aumento, las autoridades afirman que “la situación está bajo control”, asegurando que “las fuentes de agua son seguras y el sistema sanitario en la capital opera con eficiencia”. Sin embargo, el impacto es devastador. El 90% de los contagios del país se concentran en Jartum, sobre todo en las localidades de Karari, Omdurmán y Ombada.
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OMS Y UNICEF
La directora regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Mediterráneo Oriental, Hanan Balkhy, advirtió que Sudán ha registrado más de 65.000 casos y 1.721 muertes por cólera en los últimos 10 meses. “La infraestructura diezmada, el agua insalubre y los desplazamientos masivos están alimentando esta crisis prevenible”, afirmó.
Por su parte, UNICEF reveló que más de mil niños menores de cinco años han contraído cólera solo en Jartum este año, y denunció que los continuos ataques a instalaciones eléctricas han agravado la escasez de agua potable, forzando a las familias a consumir agua de fuentes contaminadas.
Entre el 15 y el 25 de mayo, los contagios diarios pasaron de 90 a 815, un aumento de casi nueve veces en solo diez días.
AMENAZA RÁPIDA Y LETAL
El cólera, causado por la bacteria Vibrio cholerae, provoca diarrea aguda y deshidratación severa que puede causar la muerte en pocas horas si no se trata con rapidez. La clave para frenar su avance está en el acceso a agua potable, saneamiento básico y atención médica inmediata con sales de rehidratación oral o líquidos intravenosos.
Mientras la OMS y otras agencias intentan responder con vacunas y suministros, la guerra en curso y la fragilidad institucional complican los esfuerzos. “Este sufrimiento provocado por el conflicto debe terminar”, concluyó Balkhy.
Un nuevo brote de cólera en Sudán causó la muerte de 70 personas en dos días https://t.co/N80NeDATfl
— Infobae América (@infobaeamerica) May 29, 2025