Un nuevo conflicto sacude la relación entre Washington y Bogotá. El presidente colombiano, Gustavo Petro, respondió a las declaraciones de su par estadounidense, Donald Trump, quien lo calificó de “matón” y “líder del narcotráfico”. Ante esas acusaciones, el mandatario colombiano anunció que acudirá a los tribunales de Estados Unidos para defender su nombre y denunciar la difamación.
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Trump, desde la Oficina Oval, afirmó que Colombia “se ha convertido en una trampa mortal” por el auge del narcotráfico y anunció la suspensión de todo tipo de ayuda financiera a Bogotá. Las declaraciones se produjeron en medio de un clima de creciente tensión diplomática, marcado por el despliegue de buques y aeronaves militares estadounidenses en el Caribe y operaciones contra presuntas embarcaciones narco frente a las costas colombianas.
Petro replicó en redes sociales que “de las calumnias lanzadas en territorio estadounidense” se defenderá judicialmente, aclarando que su disputa “no es con el pueblo norteamericano, sino con Trump”. También reiteró que Colombia está dispuesta a cooperar en la lucha contra el narcotráfico, pero “sin aceptar sanciones ni estigmatizaciones”.
Las fricciones entre ambos países no son nuevas. Desde el regreso de Trump a la Casa Blanca en enero, Washington y Bogotá han chocado por temas migratorios, medioambientales y, especialmente, por la postura de Petro frente a la guerra en Gaza, a la que calificó de “genocidio”. Con la producción de cocaína en niveles récord, la administración colombiana busca evitar un aislamiento que pueda afectar la cooperación internacional y las inversiones extranjeras.
Le informó al mundo que llevo 17.000 fábricas de cocaína destruidas en mi gobierno https://t.co/0KQclu7mC6
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 23, 2025
