Este viernes, el presidente estadounidense, Donald Trump, decidió poner fin de forma inmediata a las negociaciones comerciales con Canadá, argumentando su rechazo a los aranceles que ese país planea implementar.
Además, lanzó duras críticas contra la Unión Europea, a la que calificó de «Muy desagradable».
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Como ya es habitual, utilizó su red Truth Social para comunicar el fin del diálogo bilateral.
CANADÁ
«Acabamos de ser informados de que Canadá, un país con el que es muy difícil comerciar, incluido el hecho de que ha cobrado a nuestros agricultores aranceles de hasta un 400 % durante años sobre los productos lácteos, acaba de anunciar que gravará los servicios digitales a nuestras empresas tecnológicas, lo que es un ataque directo y flagrante a nuestro país», escribió.
A raíz de este anuncio, Trump afirmó que Estados Unidos daba por cerradas «Todas» las conversaciones comerciales con Canadá «Con efecto inmediato» y que en el transcurso de los próximos siete días se comunicarían los nuevos porcentajes arancelarios.
Aunque el plazo oficial para las discusiones sobre los llamados «Aranceles recíprocos» termina el 9 de julio, el mandatario adelantó que preferiría reducir ese periodo. Aseguró también que no todos los países llegarán a un acuerdo con su administración.
IMPUESTO
El impuesto que desató su molestia grava con un 3 % los ingresos superiores a 20 millones de dólares obtenidos por servicios digitales brindados a residentes en Canadá, con aplicación retroactiva desde 2022.
Trump sostuvo que Ottawa se ha convertido en un socio difícil y advirtió que el país norteamericano no tiene una posición favorable.
«Tenemos todas las cartas. Todas ellas. Y no queremos hacer nada malo, pero tenemos mucho poder económicamente sobre Canadá. Preferiría no utilizarlo», agregó, acusando además a Canadá de imitar a Europa con este tipo de impuestos a las tecnológicas.
PRIMER MINISTRO CANADIENSE
El primer ministro canadiense, Mark Carney, restó importancia tanto a las amenazas como a la ruptura de las conversaciones: «Seguiremos realizando estas complejas negociaciones en el mejor interés de los canadienses», señaló.
No solo Canadá fue blanco de las críticas de Trump. También se refirió a la Unión Europea y sus medidas fiscales.
A su juicio, la UE «Es muy desagradable» por imponer «Impuestos muy injustos» a las empresas estadounidenses, aunque confía en que «Pronto aprenderá a no serlo tanto».
COMISIÓN EUROPEA
Desde la Comisión Europea, el comisario de Comercio y Seguridad Económica, Maros Sefcovic, afirmó en redes sociales que están trabajando «Intensamente» para alcanzar una solución consensuada.
Por su parte, la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, reafirmó el mensaje desde Bruselas: «Estamos listos para un acuerdo».
Trump reiteró que el 9 de julio es solo una fecha referencial: “Podemos hacer lo que queramos. Podríamos extenderlo, podríamos acortarlo. Me gustaría acortarlo. Me gustaría simplemente enviar cartas a todos con un ¡Felicidades! Vas a pagar el 25 %”, comentó.
Desde su regreso al poder el 20 de enero, el presidente ha promovido aranceles globales, aunque en ciertos casos ha suspendido su aplicación para permitir negociaciones internacionales.
Esta ruptura con Canadá ocurre en la misma semana en que se firmó por sorpresa un acuerdo con China. Hasta ahora, solo el Reino Unido ha cerrado formalmente un pacto con Washington, mientras se proyecta que India sea el próximo.