El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, se refirió a la construcción de una nueva cárcel de alta seguridad y confirmó la intención de establecerla en la comuna de Santiago, a pesar de la fuerte resistencia que ha surgido en el ámbito político.
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En una entrevista con TVN, el ministro indicó que siguen trabajando en el diseño del nuevo centro penitenciario, en un contexto donde la población carcelaria ha crecido un 30% en los últimos dos años.
OPOSICIÓN
En cuanto a la oposición, el diputado de la UDI, Jorge Alessandri, sostuvo que la instalación de una nueva cárcel en Santiago no resolverá la crisis actual.
Subrayó además que esta iniciativa representa un retroceso respecto a los avances logrados bajo el exministro Luis Cordero.
«Evidentemente no es la solución. Habíamos avanzado con el ex ministro Cordero, en un plan regional que incluía palca que se entrega ahora, pero también cárceles para 2000 a 3000 reclusos en cada región del país con un mismo criterio, y ese criterio por alguna razón se lo quieren saltar en Santiago Centro».
DESCONTENTO CON EL PROYECTO
Por su parte, la diputada del PPD, Helia Molina, expresó su descontento con el proyecto anunciado por el ministro, quien pertenece al Partido Comunista.
Señaló que no es «partidaria» de un recinto en Santiago y advirtió que «ninguna comuna de Chile» estaría dispuesta a recibir una cárcel de alta seguridad.
«Como lo he manifestado en otras oportunidades, obviamente como diputada del distrito 10, no soy partidaria que la cárcel de máxima seguridad se haga en Santiago, porque ya hay bastantes cárceles. Pero entiendo también la realidad, yo creo que ninguna municipalidad de Chile quiere tener una cárcel de alta seguridad».
Finalmente, Gajardo señaló que el proceso de licitación para el proyecto comenzará en 2025 y destacó que este avance quedará como un legado para los gobiernos futuros.