La Comisión de Energía de la Cámara de Diputados aprobó los tres pilares de financiamiento propuestos por el Gobierno para ampliar el subsidio eléctrico el aumento del IVA en las tarifas, un alza transitoria del impuesto al CO2 y la implementación del controversial «cargo FET» a los Pequeños Medios de Generación Distribuida (PMGD).
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Este último punto generó fuertes críticas de la industria energética e inversionistas internacionales, quienes señalaron su preocupación por el impacto en la competitividad del sector.
El ministro de Energía, Diego Pardow, celebró la aprobación, calificándola como «una noticia muy importante para las familias chilenas».
Según explicó, los recursos permitirán triplicar la cobertura del subsidio, alcanzando a 4,7 millones de hogares, y garantizar su extensión hasta 2027.
No obstante, Pardow lamentó que en el proceso legislativo se hayan descartado iniciativas clave como la bolsa PYME y el financiamiento para las APR, comprometiéndose a trabajar con la Comisión de Hacienda para reponerlas en la próxima etapa.
DIVISIÓN EN LA OPOSICIÓN
A pesar del respaldo oficialista, el proyecto generó divisiones en la oposición. Algunos legisladores cuestionaron que el aumento del IVA sería suficiente para cubrir a los actuales beneficiarios (menos de dos millones de hogares) y que los nuevos mecanismos generarían excedentes innecesarios.
En respuesta, Pardow señaló que el objetivo es ampliar el alcance del subsidio y beneficiar a más familias de clase media, incluyendo un ambicioso programa de instalación de techos solares.
La votación fue aprobada con el apoyo de diputados oficialistas y del opositor Álvaro Carter (UDI), quien cambió su voto en el último momento.
Carter justificó su decisión señalando que las empresas tuvieron tiempo para adaptarse a los cambios y que «el problema debe solucionarse hoy, sin trasladarlo al próximo gobierno».
El apoyo a la medida marca un paso clave en la estrategia del Gobierno para mitigar el impacto de las alzas tarifarias en las familias chilenas. Sin embargo, las críticas persisten, y el debate continuará en las próximas fases del proceso legislativo.