El fin de semana estuvo marcado por las altas temperaturas en la zona central, debido a que los termómetros marcaron sobre los 37 grados en algunos sectores.
Producto de ello, la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) emitió una alerta para cuatro regiones del país, las cuales abarcaron desde la Metropolitana hasta Ñuble.
A esto, se suma que el pasado sábado 21 de diciembre se dio inicio a la estación de verano, por lo que las altas temperaturas serán más frecuentes. De hecho, desde el 24 al 25 de diciembre, se registrará un evento extremo entre las regiones del Maule y Los Lagos.
Frente a este caluroso panorama, a continuación conozca las recomendaciones y consecuencias que puede tener en su salud estas temperaturas.
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CONSECUENCIAS
Durante los eventos de altas temperaturas, las personas pueden sufrir diversas afecciones en su salud, entre ellas se encuentran la deshidratación y el golpe de calor.
Respecto a la deshidratación, la Clínica Mayo señala que ocurre «cuando usas o pierdes más líquido del que ingieres, y tu cuerpo no tiene suficiente agua y otros fluidos para llevar a cabo sus funciones normales».
En ese contexto, el Ministerio de Salud (Minsal) precisa en su página web que los síntomas de deshidratación son: sed, boca seca, cambios en la orina, ausencia de sudoración, piel seca, letargo y desorientación. A ello se suma la debilidad muscular, cefalea, mareos o desmayos, calambres y taquicardia.
Junto con lo anterior, recomiendan que, en caso de estar deshidratado, se debe tomar abundante líquido (agua y/o bebidas deportivas). Si la situación fuera más grave, se sugiere ir a un centro de salud.
Por otro lado, durante los periodos de altas temperaturas también se pueden presentar golpes de calor. Lo cual, según precisa la Clínica Mayo, «es un trastorno ocasionado por el exceso de calor en el cuerpo, generalmente como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas o del esfuerzo físico en altas temperaturas».
El Minsal precisa que los síntomas de golpe de calor son: piel caliente, enrojecida, seca o húmeda, taquicardia, cefalea, mareos, náuseas, confusión y desmayo.
Junto con ello, detallan que esto es una emergencia médica, por lo que se debe acudir al centro de salud más cercano. Además, se debe llevar a la persona a un sitio fresco, ponerle paños fríos o darle un baño con agua fría, y no darle de beber líquidos.
RECOMENDACIONES
Junto con lo anterior, desde el Minsal entregan una serie de recomendaciones para este periodo:
– Mantenerse hidratado bebiendo líquidos, especialmente agua.
– Utilizar ropa y calzado ligeros, los cuales permitan la transpiración. Junto con ello, se sugiere optar por colores claros o neutros.
– Mantenerse, en la medida de lo posible, en lugares frescos y bien ventilados. Además, caminar a la sombra y con un gorro que proteja del contacto directo con el sol.
– Controlar la exposición directa a los rayos solares, especialmente entre las 10.00 y 16.00 horas.
– Aplicar protector solar con factor mayor o igual a 30 al menos cada 2 horas. En caso de realizar una actividad que ocasione la pérdida del protector solar, vuelva a aplicar.
– Asegurarse que bebés, niños, niñas, personas de edad avanzada o animales no queden solos en vehículos estacionados y con las ventanas cerradas.
Cabe señalar que quienes tienen más riesgo frente a estas condiciones climáticas son las las personas mayores de 65 años que presentan dificultades importantes de la movilidad.
También, las personas que toman determinados fármacos, los niños y niñas menores de 4 años, y quienes pasan varias horas en exteriores y en lugares muy calurosos.
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