La tasa de desempleo en Chile alcanzó un 8,9% durante el trimestre comprendido entre marzo y mayo de 2025, de acuerdo con los datos entregados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) a través de la Encuesta Nacional de Empleo (ENE).
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Este indicador representa un aumento de 0,6 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año anterior. Este incremento se explica porque la fuerza de trabajo creció un 0,8%, superando el alza registrada en la cantidad de personas ocupadas, que fue de solo 0,2%.
EMPLEO INFORMAL
En tanto, la población desempleada subió un 8,5%, impulsada principalmente por quienes se encuentran cesantes (8,3%) y por aquellas personas que están en busca de su primer empleo (10,4%).
En relación con el empleo informal, la tasa llegó al 26,0%, lo que implica una baja de 2,2 puntos porcentuales en doce meses. La cantidad de personas con empleos informales se redujo en un 7,8%, con disminuciones tanto en hombres (-8,0%) como en mujeres (-7,5%).
DESEMPLEO EN CHILE CRECE
Según se indicó en un comunicado, «La tasa de participación entre marzo y mayo fue de 62,2%, sin variación, mientras que la de ocupación fue de 56,6% (-0,4 pp.)».
Por su parte, la población que no forma parte de la fuerza laboral aumentó un 1,0%, cifra influida por el crecimiento de personas inactivas potencialmente activas (7,2%) y de inactivas habituales (0,1%).
En el caso de las mujeres, la desocupación llegó al 10,1%, con una variación de 0,8 puntos porcentuales, debido a que la fuerza de trabajo femenina subió un 1,4%, mientras que el número de mujeres ocupadas lo hizo solo en un 0,5%.
MUJERES
Asimismo, «Las mujeres fuera de la fuerza de trabajo, por su parte, se expandieron 0,3%, influidas por las inactivas potencialmente activas y las iniciadoras», precisó el informe del INE. Las mujeres desocupadas aumentaron un 10,6%, con una tasa de participación de 53,0% (0,2 pp.) y una de ocupación de 47,7%, lo que representa una baja de 0,2 puntos porcentuales.
En el caso de los hombres, la tasa de desocupación fue de 8,1% (0,5 pp.), lo que se explica por un crecimiento de 0,4% en la fuerza de trabajo y una leve caída de 0,1% en los ocupados.
Según detallaron, «Los desocupados, en tanto, aumentaron 6,6%; mientras las tasas de participación y ocupación se situaron en 71,7% y 65,9%, decreciendo 0,3 pp. y 0,7 pp., respectivamente».
La cantidad de hombres fuera de la fuerza laboral creció un 2,2%, cifra determinada por el aumento tanto de inactivos habituales como de inactivos potencialmente activos.
PERSONAS OCUPADOS
En cuanto al total de personas ocupadas, se registró un incremento de 0,2%, impulsado únicamente por las mujeres, cuyo empleo subió en esa misma proporción. En contraste, los hombres mostraron una disminución de 0,1%.
El INE también destacó que «Los sectores económicos que más contribuyeron al incremento de la población ocupada fueron alojamiento y servicio de comidas (11,2%), minería (9,8%), comunicaciones (10,7%) y actividades financieras y de seguros (10,4%)».
En cuanto a la categoría ocupacional, se observaron alzas en el empleo de personas asalariadas formales y de quienes se desempeñan como empleadoras, con un aumento de 2,1% en ambos casos.