Nacional y economía

Encuesta dice que 81% respalda construcción de nueva cárcel, pero no la quieren en su comuna

Santiago Henríquez

Esta paradoja refleja la tensión existente entre la búsqueda de soluciones a la problemática de la inseguridad y la preocupación de los ciudadanos por su calidad de vida

Encuesta dice que 81% respalda construcción de nueva cárcel, pero no la quieren en su comuna

La propuesta del gobierno de construir una nueva cárcel de máxima seguridad en la Región Metropolitana ha generado una profunda división en la sociedad chilena. Según una reciente encuesta de Black & White, el 81% de los encuestados considera urgente la creación de este recinto penitenciario para abordar la creciente ola de delincuencia que azota al país.

Sin embargo, esta necesidad choca frontalmente con la oposición de las comunidades locales, ya que un 66% de los encuestados se niega a que la cárcel se instale en su comuna.

Esta paradoja refleja la tensión existente entre la búsqueda de soluciones a la problemática de la inseguridad y la preocupación de los ciudadanos por su calidad de vida y el bienestar de sus comunidades.

Mientras que una parte significativa de la población demanda medidas más drásticas para combatir el crimen, otra se resiste a vivir bajo la sombra de un establecimiento penitenciario de alta seguridad.

Comuna donde se construya debería recibir una compensación

El gobernador metropolitano, Claudio Orrego, ha respaldado la necesidad de construir una nueva cárcel, argumentando que es una medida necesaria para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.

Sin embargo, ha reconocido la complejidad del tema y ha llamado al Gobierno a implementar un plan de compensaciones para las comunas que deban albergar este tipo de recinto. «Te puedo asegurar que donde se quiera instalar, habrá oposición de la comunidad», afirmó Orrego, subrayando la importancia de abordar las preocupaciones de los vecinos.

Por su parte, diversas organizaciones sociales y vecinos afectados han expresado su rechazo a la propuesta. Argumentan que la construcción de una cárcel de máxima seguridad generaría una serie de problemas sociales y económicos, como la disminución del valor de las propiedades, el aumento de la delincuencia en los alrededores y la estigmatización de las comunidades.

Además, cuestionan la efectividad de este tipo de medidas para reducir la criminalidad a largo plazo.
Lea también  ¿Qué sanciones podrían enfrentar los gendarmes por el trato preferencial a Macaya?

 


 

Comparte en:

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email

Comenta este artículo