Nacional y economía

Encuesta revela las acciones que más enojan a los chilenos

Valentina Torres

Entre las incivilidades más frecuentes entre chilenos destaca hablar por teléfono a viva voz, presenciada por 2 de cada 3 personas a diario

Un reciente estudio de la consultora Datavoz, en colaboración con la Universidad del Desarrollo, reveló que cuáles son las acciones cotidianas, que más molestan a los chilenos y que estarían actuando como señales de un deterioro en la convivencia social y una creciente falta de consenso sobre las normas de comportamiento en el espacio público.

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Las prácticas analizadas, que podrían ser catalogadas como incivilidades, en general provocan rechazo en la mayoría de los chilenos, sin embargo esta negativa a dichas conductas o acciones no es uniforme entre las personas.

El estudio evaluó tres dimensiones clave:

-Tolerancia individual frente a ciertas conductas.

-Percepción del entorno respecto a esas mismas prácticas.

-Frecuencia con que se observan en la vida diaria.

Esta combinación permite mapear las tensiones sociales invisibles entre lo que nos molesta, lo que creemos que molesta a otros y lo que realmente ocurre.

Conducir por la berma y música fuerte: las conductas más rechazadas

Los datos muestran que el rechazo social no es uniforme. Sin embargo, dos conductas concentran un alto nivel de desaprobación:

-Conducir por la berma (rechazada por el 90% de los encuestados).

-Poner música a alto volumen en la playa (84% lo considera inaceptable).

-Por el contrario, acciones como llevar mochilas grandes en el transporte público generan opiniones divididas: solo un 16% las desaprueba tajantemente.

Una de las conclusiones más relevantes del informe es la existencia de un fenómeno llamado «ignorancia pluralista»: muchas personas creen que los demás toleran más ciertas conductas de lo que realmente ocurre. Por ejemplo, aunque el 90% rechaza conducir por la berma, solo el 64% cree que eso molesta a su entorno.

Esta percepción distorsionada debilita los mecanismos informales de control social. Si las personas creen que “los demás aguantan más”, se reduce la presión colectiva para corregir comportamientos disruptivos.

Entre las incivilidades más frecuentes destaca hablar por teléfono a viva voz, presenciada por 2 de cada 3 personas a diario. Le siguen el uso excesivo de música en playas y la invasión de bermas.

El estudio también evidencia diferencias generacionales y de género: las personas mayores y las mujeres tienden a ser menos tolerantes con estas conductas. Además, quienes viven en sectores de mayores ingresos perciben una mayor tolerancia en su entorno, aunque no necesariamente en sus propias actitudes

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