La consultora eléctrica Inodú emitió una clara advertencia sobre la posibilidad de un nuevo apagón total en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
En un informe realizado por su director, Jorge Moreno, se analizaron las diferentes consideraciones sistémicas que habrían influido en la propagación de la falla, la cual comenzó con la apertura de los dos circuitos de la línea Nueva Maitencillo – Nueva Pan de Azúcar 500 kV, operada por Isa Interchile.
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Se identificaron varias «brechas» que indican que «la posibilidad de ocurrencia de un nuevo evento de blackout sigue presente y no depende exclusivamente del nivel de transferencias del circuito norte».
INFORME
El informe destaca factores clave, como el funcionamiento de los automatismos establecidos en el Plan de Defensa contra Contingencias Extremas, los cuales permiten desconectar carga tanto de generación como de consumo en caso de perturbaciones en la operación normal del SEN.
El reporte de 31 páginas enumera los factores que podrían dejar sin suministro eléctrico a todo el SEN: una actuación incorrecta de los automatismos para contener aumentos de frecuencia en el norte; la mayor sensibilidad del sistema eléctrico debido a menores recursos que fortalecen la red e inercia en la zona central; el efecto acumulado de los Pequeños Medios de Generación Distribuida (PMGD), que hoy representan cerca del 30% de la generación diurna del sistema; una actuación incorrecta de los automatismos para contener reducciones de frecuencia en las zonas central y sur; y la política de asignación de reservas de control primario y secundario de frecuencia en la operación del sistema.
DOCUMENTO
El documento hace hincapié en la alta penetración de las controversiales centrales PMGD, cuyo mecanismo de remuneración -el denominado precio estabilizado- ha generado polémica entre diversas empresas del sector energético.
Estas centrales, cuya capacidad instalada ya alcanza los 3.000 MW, no cuentan con «visibilidad» por parte del Coordinador Eléctrico Nacional (CEN) y tienen una norma de autodespacho. Esto implica que su operación no está sujeta a la optimización del SEN, que está a cargo del Coordinador.
En particular, el informe revisa las «brechas» derivadas del «efecto PMGD», entre ellas, la rápida desconexión de estas unidades frente a variaciones importantes de la frecuencia y una «consideración incompleta» del desarrollo masivo de estas generadoras en las normas técnicas de calidad y seguridad de suministro.
FALLA
El reporte señala que la secuencia de la falla demostró que el subsistema centro-sur, la zona del país donde más se concentran este tipo de centrales, fue la primera en colapsar, después de que la frecuencia cayera a 47,5 Hz a los 5 segundos del evento.
El SEN opera dentro de una banda estrecha de frecuencia, entre 49,9 y 50,1 megahercios, y existen tiempos de desconexión establecidos por la normativa cuando se superan esos límites.
En el caso de las centrales PMGD, el tiempo de desconexión es de 0,1 segundos si la frecuencia cae por debajo de 47,5 Hz, pero sube a 90 segundos si la frecuencia está entre 47,5 y 49 Hz.
ESQUEMAS Y BRECHAS
«Los esquemas de desprendimiento de carga no estaban diseñados para evitar que la frecuencia del sistema incurra y se mantenga en una zona donde existe el riesgo de una desconexión masiva de PMGD. Al mismo tiempo, las reservas de control primario de frecuencia del SEN no están preparadas para suplir la salida de los casi 2.000 MW en PMGD que operaban en esa hora y que probablemente se desconectaron masivamente al bajar la frecuencia», señala el informe.
Otras brechas identificadas en los PMGD apuntan al efecto de su desarrollo en los automatismos para el desprendimiento de carga, indicando que «las normas técnicas no toman en cuenta que la penetración de PMGD cambia la dinámica de la red de distribución y produce que la activación del Esquema de Desconexión Automática de Carga (EDAC) por Baja Frecuencia tenga un comportamiento contraproducente en algunos alimentadores, de modo que, en vez de desconectar carga, el efecto neto es reducir la generación disponible».
RÉGIMEN DE OPERACIÓN
El informe también agrega que «el régimen de operación con autodespacho ha sido interpretado erróneamente para excluir a esta generación de una adecuada coordinación por parte del Coordinador o Centro de Control de la empresa Distribuidora, no considerando objetivos sistémicos de seguridad ni el principio de equidad en la asignación de vertimiento entre todas las fuentes de generación de igual costo variable».
Para evitar un nuevo apagón, el documento sugiere adoptar medidas urgentes. Entre ellas, «evitar que ante contingencias se produzcan reducciones de frecuencia entre 47,5 y 49 Hz por periodos superiores a 60 segundos, tiempo por validar acorde a la vulnerabilidad de PMGD y generación distribuida (net-billing)», y evaluar la necesidad de limitar el despacho de fuentes de generación vulnerables a caídas de frecuencia bajo los 49 Hz.
Asimismo, se propone «evitar desconectar generación térmica o hidroeléctrica por sobrefrecuencia si hay generación renovable variable despachada» y «considerar como contingencia extrema cierto nivel de desconexión masiva de PMGD y GD ante una baja de frecuencia bajo 49 Hz».
PREPARACIÓN
El apagón nacional provocó un notable incremento en la compra de productos de emergencia. Grandes cadenas comerciales reportaron un aumento en la demanda de linternas, velas y generadores eléctricos, lo que las llevó a reforzar su inventario para satisfacer las necesidades de los consumidores.
Elementos esenciales para enfrentar emergencias
Es fundamental contar con un kit de emergencia, que debe guardarse en un bolso o mochila cerca de una vía de evacuación, y debe incluir:
Documentos personales.
Dinero en efectivo.
Mapa.
Lista de medicamentos (incluyendo recetas médicas e información relevante).
Contactos de emergencia.
Llaves.
Celular con cargador portátil.
Radio portátil.
Linterna.
Suministros de primeros auxilios.
Además, es recomendable tener una caja de provisiones básicas para tres días para la familia, que incluya:
Medicamentos esenciales.
Agua potable.
Alimentos no perecibles que no requieran cocción.
Bolsas de basura.
Medidas de seguridad ante desastres
Terremotos:
En Chile, la mayoría de las personas ha experimentado sismos de gran magnitud. Aunque existe una cultura sísmica arraigada, es importante seguir ciertas precauciones:
No apresurarse a salir. Refúgiese bajo una mesa o escritorio.
Si está en la cama, cúbrase la cabeza con una almohada.
En el exterior, aléjese de estructuras que puedan colapsar.
Si está en un vehículo, deténgase y evite estar cerca de edificios o árboles.
Prepárese para réplicas.
Como medidas preventivas, se recomienda:
Fijar los muebles altos a las paredes.
Evitar colgar objetos pesados sobre camas, sofás o sillas.
Practicar simulacros de seguridad.
Aprender a cerrar el gas, el agua y cortar la electricidad.
Incendios forestales:
El aumento de las temperaturas y la actividad al aire libre en verano elevan el riesgo de incendios forestales. Para prevenirlos:
Tener un plan ante cortes de electricidad.
Evitar el uso de velas.
Disponer de un pañuelo o mascarilla para proteger las vías respiratorias.
Verificar el estado de las mangueras de agua.
Mantener limpias las canaletas y eliminar la maleza cerca de la vivienda.
Si se enfrenta a un incendio forestal, siga estas instrucciones:
No permanezca en la zona para observar el fuego. Evacúe cuando se lo indiquen.
Aléjese rápidamente de áreas con humo.
Mantenga puertas y ventanas cerradas y apague el aire acondicionado.
Abra o retire las cortinas y persianas.
Prepare a su mascota para la evacuación en un canil.
