Nacional y economía

Fiscal Barros dice que casas de tortura se relaciona con disputas por mercado de la Ketamina

Agencias

fiscal Héctor Barros
A su juicio, el alza en la violencia “era lógica” tras el “desplazamiento muy repentino de inmigración ilegal”.

«Lo que está ocurriendo acá es una disputa por un mercado, que es la venta de ketamina», dijo el fiscal a cargo del Equipo contra el Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), Héctor Barros, al referirse al desmantelamiento en Maipú de dos «casas de tortura» vinculadas al Tren de Aragua.

«De acuerdo a los antecedentes investigativos, lo que buscan las organizaciones venezolanas es que se fije un precio igualitario entre lo que venden ellos como venezolanos y lo que venden los inmigrantes colombianos», agregó.

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En un operativo liderado por Carabineros y la Fiscalía dado a conocer el 17 de enero se detuvo a seis personas que estarían vinculadas al Tren de Aragua.

Además, fueron allanadas dos «casas de tortura» en Maipú, donde secuestraban, torturaban e incluso asesinaban a sus víctimas en caso de no recibir el dinero solicitado, según indicaron las autoridades.

Las declaraciones las hizo el fiscal Barros en radio Pauta, donde se refirió a los operativos de los últimos días.

NUEVA CRIMINALIDAD

A juicio del fiscal Barros, es por la disputa por el mercado de la Ketamina que han surgido «los secuestros y posteriores ejecuciones cuando no se pagan los rescates. Esa es la dinámica que está debajo, los fenómenos que están detrás de lo que estamos viendo».

«Ellos (los ejecutores) no tienen problema en que los cuerpos aparezcan a ocho minutos del lugar o a muy poca distancia, porque muchas veces lo que buscan las organizaciones es dar un mensaje a las potenciales víctimas», explicó.

Especificó que «es un acto de comunicación de ‘si usted no paga, estas son las consecuencias'».

En esa línea, Barros comentó que «la frialdad con la que actúan es impresionante para la cultura delictual que nosotros tenemos».

De hecho, relató que «cuando antes había una víctima menor de edad, eran los propios círculos delincuenciales quienes informaban a las policías o al Ministerio Público quién es el autor. Esos códigos han ido desapareciendo por contagio con estas otras estructuras criminales».

«Por lo tanto, nosotros estamos viendo una realidad que existía en Centroamérica y que ahora se extrapoló a nuestro país, a propósito de la inmigración», sintetizó.

FENÓMENO NUEVO

A su juicio, las casas de tortura son «un fenómeno nuevo que hemos estado apreciando”.

Asimismo, recalcó que “desde que se produjo el allanamiento la semana pasada a la primera casa de cautiverio, no hemos vuelto a tener hasta ahora, ningún secuestro con homicidio de ciudadano extranjero”.

Agregó que “eso muestra la trascendencia e importancia de este lugar”.

Puntualizó que “las casas que hemos encontrado de cautiverio son casas que están vinculadas, en este caso, con evidencia que son pertenecientes al Tren de Aragua”.

Barros recalcó que “el crimen organizado es una amenaza bastante concreta y bastante real. Nosotros siempre miramos desde nuestra realidad a países centroamericanos en su momento, y nunca pensamos que eso pudiera ocurrir en nuestro país“.

“Ahora, estos fenómenos, era lógico que se produjeran en nuestro país y que nos tengan en la situación que hoy nos tienen, todo a vez que hubo un desplazamiento muy repentino y muy grande de la inmigración ilegal“, añadió.

 

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