La Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (ANOP) denunció dos nuevas amenazas de muerte dirigidas a funcionarios de Gendarmería.
La primera amenaza se dirigió a la hermana de un oficial que sufrió un ataque armado en Cauquenes el pasado domingo, mientras que la segunda afectó a un funcionario que trabaja en el penal Santiago 1. Ambas amenazas se recibieron mediante la plataforma de mensajería instantánea WhatsApp.
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En ese sentido, el coronel Andrés Muñoz, secretario nacional de ANOP, aseguró que las amenazas se realizaron simultáneamente, lo que ha generado una creciente preocupación dentro de la institución.
Asimismo, Muñoz señaló que la amenaza contra la hermana del oficial que ya fue víctima de un ataque armado en la región del Maule generó bastante impacto, ya que esta nueva intimidación llega en un contexto de agresiones previas.
«Nosotros creemos que estas amenazas podrían estar relacionadas con una serie de procedimientos que se están tomando en el interior del recinto Santiago 1, en donde se han logrado incautar una gran cantidad de especies prohibidas, principalmente teléfonos celulares y droga», afirmó.
Según la ANOP, estas amenazas podrían ser una represalia por las acciones que la administración penitenciaria está implementando para mantener el control dentro de los recintos.
ESCALADA EN LA SITUACIÓN
La situación ha escalado después de que el pasado sábado, un oficial de Gendarmería en la región del Maule fuera atacado a tiros en su propia casa.
En el ataque, los perpetradores dispararon 10 veces contra la fachada de la vivienda, siete de los disparos lograron ingresar al inmueble. Además, dejaron una corona de flores y una carta con amenazas.
Estos hechos han generado un clima de creciente tensión entre los funcionarios de Gendarmería, quienes denuncian un incremento de las amenazas y agresiones contra su personal. Las autoridades han tomado conocimiento de las nuevas amenazas y se espera que se tomen medidas de seguridad para proteger a los gendarmes y sus familias.
La ANOP ha solicitado que se investigue a fondo la conexión entre estas amenazas de muerte y las recientes acciones en el penal Santiago 1, y que se adopten medidas para garantizar la seguridad de los oficiales y sus seres queridos.
