El gobernador de Arica, Diego Paco, abordó la mañana de este miércoles la liberación del sicario de nacionalidad venezolana, señalando que «Aquí nosotros hablamos de lo del escape del sicario de la cárcel, no es una negligencia, es un Estado fallido».
Lea también: Herederos de Pinochet deberán devolver fondos malversados por el dictador
Durante una entrevista con Radio Agricultura, Paco expresó su preocupación por el recorrido que realizó el individuo desde su entrada al país hasta su posterior salida tras quedar en libertad, indicando que «Nos tiene bastante resignados, molestos, enojados, y aquí nosotros lo que pedimos es una mirada, un énfasis serio. Aquí en el norte de Chile, en la frontera, porque nos hemos preocupado mucho del ingreso de las personas, pero no hay ningún control para el ingreso, como ocurrió en el caso de este sicario», detalló.
GOBERNADOR DE ARICA
El gobernador también comentó los antecedentes que circulan sobre un eventual control al sicario mientras se dirigía al norte, y cuestionó la facilidad con la que habría logrado su desplazamiento: «Pagar dos millones y medio para trasladarse desde Santiago a Arica, perfectamente pudo haber comprado una cédula de identidad, un carnet falso, pudo haber pedido un carnet falso de su país».
Asimismo, criticó la desconexión entre las instituciones del Estado, subrayando que «No hay una base de datos en conjunto, integrada, donde el Ejército, PDI, Carabineros, pueda verla en conjunto».
FRONTERA
Según explicó, «Hoy día en la frontera (las instituciones) funcionan como islas, bueno, y a nivel nacional, como islas, son muy celosos de la información, no logran cruzar si es que tiene orden de captura, si es que tiene algún delito, si es que tiene algún antecedente. Es controlado, se le toma los antecedentes, se le toman los datos y sigue el paso».
Añadió que «En las fronteras las instituciones no deberían ser celosas de la información, no deberían funcionar como islas, sino más bien deberíamos tener un control único integrado con la información disponible para todas las instituciones públicas que trabajan hoy día en los bordes fronterizos».
EJÉRCITO
También se refirió al papel que cumple el Ejército en estas zonas, afirmando que «La Fuerza Armada aquí está sobrepasada, se le ha quitado el piso, se le ha quitado facultades, y ellos actúan en base a lo que les permiten», agregando que “actualmente es un mero testigo con las capacidades y con las facultades y las limitaciones que le han puesto».
Finalmente, hizo un llamado a fortalecer sus atribuciones, indicando que «Aquí hay que darle más facultad al ejército para que no solamente pueda hacer un control, pueda hacer algo más allá», y que debieran poder «Hacer un control, hacer una retención, mantenerlo, hasta que se haga una investigación».