Este viernes, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) presentó un balance a cinco años del estallido social, En el cual, reportan que, de las 3.233 querellas que interpusieron por 3.828 víctimas, la justicia solo ha dictado 42 sentencias condenatorias ejecutoriadas.
Desde el organismo señalaron que el balance es «preocupante». Puesto que, a cinco años de «registrarse numerosas y graves violaciones a los derechos humanos», un porcentaje importante de las causas comenzará su prescripción por los plazos legales.
En esta línea, explicaron que la situación se puede atribuir a «los tiempos propios de la justicia y también a la pandemia» del COVID-19. A ello, se suma la «falta de recursos» de las instituciones colaboradoras en las investigaciones.
Cabe señalar que del total de víctimas, 2.852 (75%) son hombres y 973 (25%) mujeres. Del total de víctimas consignadas por el INDH, 3.640 sufrió alguna lesión sin resultado de muerte, mientras que siete personas fallecieron debido a los hechos denunciados.
Junto a lo anterior, destacaron que 1.481 víctimas pertenecen a uno o más grupos de especial protección, mientras que 603 eran niños, niñas o adolescentes al momento de las vulneraciones. «El 20% de las víctimas mujeres, denunció algún hecho de violencia sexual».
Respecto a los hechos vulneratorios, que fueron 5.581, los más frecuentemente denunciados por las víctimas corresponden a agresiones físicas directas (2.095). Esto es seguido por disparos (1.887) y desnudamientos (386). 3.958 ocurrieron en sitios públicos, 745 en lugares de custodia y 592 en vehículos de traslado.
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DENOMINADOR COMÚN
El INDH sostuvo que las vulneraciones perpetradas tienen un denominador común:
«Ocurrieron en espacios donde los medios de prueba resultan complejos de reunir (en sitios de privación de libertad o durante escaramuzas callejeras), panorama que dificulta la determinación de las responsabilidades».
«Vista esta situación y el bajo número de condenas firmes y ejecutoriadas, no se puede, sino concluir, que la impunidad ha sido la tónica de los resultados de los procesos de justicia», sentencian desde el organismo de derechos humanos.
Por último, a modo de reflexionar, señalaron que en el quinto aniversario del estallido social como INDH insisten en su demanda al Estado de «reforzar su labor en los pilares de la justicia transicional: la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición».
