Este mes, Compassion in World Farming (CIWF) publicó su último informe europeo Chicken Track. En el cual, hace un seguimiento de los avances de las empresas de la industria avícola hacia el cumplimiento de los requisitos de mayor bienestar del «Compromiso por un Mejor Pollo» (BCC por su nombre en inglés).
En concreto, el reporte informa sobre el cumplimiento de criterios científicos, con los que se mejoraría significativamente la vida de millones de pollos de engorde.
Considerando esto, Chile tiene la oportunidad de responder a las cambiantes expectativas de los consumidores y adoptar normativas en los principales mercados de exportación.
El sector agrícola chileno se ha centrado desde hace tiempo en la diferenciación, aprovechando su diversidad climática, prácticas de sostenibilidad y sus normas de trazabilidad para posicionarse como productor de alta calidad en los mercados mundiales.
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INDUSTRIA AVÍCOLA
Según informaron en un comunicado, Chicken Track EU 2024 evalúa 93 empresas alimentarias de toda Europa. Las cuales, se han comprometido a la transición hacia una producción de pollos con mayores estándares de bienestar.
En esa línea, se realiza un seguimiento de los progresos que las empresas comunican públicamente sobre el cumplimiento de los criterios clave de la BCC, que incluyen:
– Utilizar razas de pollos de crecimiento más lento y más sanas.
– Proporcionarles más espacio para vivir.
– Entregarles enriquecimiento como luz natural, perchas y sustratos para picotear como grano y paja.
– Adoptar prácticas de sacrificio más humanas.
– Cumplir con auditorías de bienestar animal realizadas por terceros y publicar informes públicos anuales.
SECTOR AGRÍCOLA CHILENO
Actualmente, el país está experimentando una creciente concientización por parte de los consumidores sobre el bienestar animal. En ese contexto, se genera una oportunidad para que las empresas que operan en Chile adopten prácticas de abastecimiento acorde a las normativas mundiales.
De hecho, la visión para la Agricultura y la Alimentación de la Comisión Europea, publicada en febrero de 2025, ha reforzado la importancia del bienestar animal en el comercio.
Por ello, para el país, la producción avícola con mayores estándares de bienestar representa una oportunidad y una forma de destacar en un mercado competitivo dominado por exportadores de gran volumen.