La vicepresidenta de la República y ministra del Interior, Carolina Tohá, confirmó este martes la extradición desde Costa Rica de Maikel Villegas Rodríguez, acusado de secuestro y asesinato del exmilitar venezolano Ronald Ojeda.
El imputado llegó a Chile en un vuelo que aterrizó en el Grupo 10 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh), escoltado por un importante despliegue de la Policía de Investigaciones (PDI).
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Tohá describió la extradición como un “logro enorme” para la justicia chilena, resaltando la colaboración internacional que permitió llevar a cabo el proceso en un tiempo récord.
FORMALIZACIÓN Y DETALLES DEL CASO
El Ministerio Público formalizará a Villegas este miércoles en la mañana.“Un avión de la FACh ha trasladado desde Costa Rica a Maikel Villegas, ciudadano venezolano, acusado por los delitos de secuestro y homicidio de Ronald Ojeda, también venezolano”, señaló Tohá.
La ministra destacó el trabajo conjunto entre la Fiscalía, la PDI y las autoridades de Costa Rica, lo que permitió concretar la extradición en tan solo cuatro meses. “En la experiencia que hemos tenido como país, este plazo es considerado récord. Esto demuestra el compromiso de nuestras instituciones en la persecución de delitos graves”, afirmó.
COOPERACIÓN INTERNACIONAL COMO CLAVE DEL ÉXITO
Tohá subrayó la importancia de la colaboración internacional en este caso. “Gracias al apoyo de otros países, sus policías, fiscalías y sistemas de justicia, hemos podido superar los obstáculos que enfrentan los procesos de extradición en casos complejos”, agregó.
El avión que transportaba al acusado Villegas aterrizó cerca de las 8 p.m. en la base aérea del Grupo 10 de la Fuerza Aérea de Chile, donde un equipo especial de la Policía de Investigaciones (PDI) lo esperaba para recibirlo. Las autoridades judiciales recibirán a Villegas para iniciar el proceso legal en su control.
UN PRECEDENTE EN LA LUCHA CONTRA EL CRIMEN TRANSNACIONAL
Para la vicepresidenta, este caso representa un avance significativo en la lucha contra delitos graves y en la persecución de sospechosos que intentan eludir la justicia refugiándose en el extranjero. “Este es un mensaje claro: no habrá impunidad. Las instituciones chilenas están comprometidas con la verdad, la justicia y el castigo a los responsables de delitos violentos”, concluyó Tohá.
