La Asociación de Funcionarias y Funcionarios de la Defensoría de la Niñez, que representa a cerca del 80% del personal de la institución, ha iniciado un paro nacional para exigir varias mejoras, incluyendo autonomía institucional, la implementación de nueva legislación laboral y la remoción de un asesor señalado públicamente por acoso sexual y abuso de autoridad.
En su comunicado, la asociación señala incumplimientos laborales que han sido «dilatadas» por el defensor de la Niñez, Anuar Quesille, quien ejerció el cargo en 2023.
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El presidente de la organización, Gabriel Marín Figueroa, manifestó que se ha impuesto una estructura orgánica que no se consideran adecuados para el funcionamiento técnico especializado de la institución.
En sus palabras, «El criterio técnico debe estar siempre por encima de cualquier decisión o persona y que la toma de decisiones no quede supeditada a decisiones políticas».
DEMANDAS DE LA DEFENSORÍA DE LA NIÑEZ
Entre las demandas, exigen que las directoras de unidad, cargos designados a través de la Alta Dirección Pública, no dependan jerárquicamente de un cargo de confianza, como la actual jefa de gabinete, Grace Schmidt Monje, sino directamente del Defensor de la Niñez, quien debe ser el principal referente técnico y legal de la institución.
Además, piden que se implementen de manera urgente reformas laborales, tales como la reducción de jornada laboral a 40 horas, la ley de conciliación de la vida laboral y familiar, y una actualización del régimen que rige a los funcionarios.
TERMINAR EL CONTRATO DE NICOLÁS ESPEJO
El dirigente gremial concluyó: «Creemos firmemente que el trabajo institucional por la promoción, difusión y protección de los derechos de la niñez y adolescencia en Chile debe comenzar por garantizar el bienestar integral de las personas defensoras de los derechos humanos que conforman la institución. Y si bien las demandas remitidas en diversas oportunidades al Defensor de la Niñez no son una solución total a los problemas que trabajadoras y trabajadores enfrentan hoy en día, sí constituyen un avance significativo en la búsqueda de ese bienestar integral, en la construcción de ambientes laborales bien tratantes y en el resguardo de la autonomía institucional».
