Diversos estudios definen la segregación educativa como el fenómeno mediante el cual estudiantes con características similares tienden a agruparse o aislarse en ciertos establecimientos.
En este contexto, una marcada segregación socioeconómica implica que alumnos pertenecientes a un mismo estrato social se concentran en determinadas escuelas.
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Esta situación es preocupante, ya que altos niveles de segmentación dificultan el desarrollo de competencias sociales, de inclusión y formación ciudadana.
SISTEMA EDUCATIVO MÁS EQUITATIVO
A comienzos de los años 2000, Chile presentaba uno de los índices de segregación escolar más altos a nivel mundial.
Sin embargo, a lo largo del tiempo se fueron introduciendo reformas orientadas a mitigar este problema y a avanzar hacia un sistema educativo más equitativo.
Entre estas medidas destacan la Ley de Subvención Escolar Preferencial (2008) y la Ley de Inclusión Escolar (2015), que eliminó la selección, una práctica aún objeto de debate.
SISTEMA DE ADMISIÓN ESCOLAR
En ese contexto, y mientras el Sistema de Admisión Escolar (SAE) evalúa reintroducir cuotas de selección en ciertos colegios, un estudio elaborado por el Centro de Investigación Avanzada en Educación y el Instituto de Estudios Avanzados en Educación de la Universidad de Chile examinó los cambios en la segregación escolar en los últimos veinte años, analizando su relación con las políticas implementadas.
El trabajo de Juan Pablo Valenzuela, Francisco Meneses y Claudio Allende se basó en datos del SIMCE correspondientes a estudiantes de cuarto básico y segundo medio, con los cuales se construyó un índice de nivel socioeconómico (NSE) a nivel nacional.
Utilizando el Índice de Duncan herramienta estadística que mide la segregación poblacional, los autores evaluaron cuántos estudiantes deberían cambiarse de establecimiento para alcanzar una distribución socioeconómica equitativa.
Además, aplicaron el Índice H, que permite observar la segregación considerando múltiples grupos y diferencias según tipo de dependencia.
LEY SEP
Respecto a cuarto básico, los investigadores indican que «Desde la implementación de la ley SEP en el año 2008, se observa el primer cambio en la tendencia, pues la segregación deja de incrementarse, y tiende a reducirse gradualmente en los grupos de mayor vulnerabilidad, como en el de grupo medio».
Pese a ello, advierten que entre los sectores más acomodados, la segregación siguió aumentando hasta el año 2015. A partir de ese punto, en coincidencia con la entrada en vigor de la Ley de Inclusión, «Pareciera haber un reforzamiento de la reducción en la segregación social, la cual se aprecia en todos los quintiles, incluyendo el de más alto nivel».
LEY DE INCLUSIÓN
Durante el periodo 2018-2024, cuando el SAE comenzó a aplicarse plenamente bajo el marco de la Ley de Inclusión, se registró una nueva disminución en los niveles de segregación, con mayor impacto en los tres quintiles más vulnerables.
«Si se considera la totalidad del periodo de reformas (2008-2022) se observa una disminución de la segregación en todos los grupos analizados, aunque con una tendencia distinta para el 20% más rico. El grupo con más cambios ha sido el del 60% más vulnerable, el cual tuvo una disminución del 13,5%″, señalan los autores, quienes destacan que la evolución de la segregación en enseñanza básica “muestra un cambio que ha permitido a los estudiantes vulnerables y de grupos medios alcanzar los menores niveles de segregación desde que contamos con información comparable».
PUNTO MÁS BAJO
En 2024, el nivel de segregación en cuarto básico alcanzó su punto más bajo en dos décadas, con una reducción del 34%. Según el Índice de Duncan, en 2002 el 40% más vulnerable registraba un valor de 0,48, lo que implicaba que era necesario reubicar al 49,8% de los alumnos de los dos primeros quintiles para lograr una distribución equitativa.
Esta cifra subió a 52,6% en 2007, descendió a 0,50 en 2015 y llegó a 0,45 en 2024, lo que se traduce en que hoy bastaría con reubicar al 45% de ese grupo.
ESTUDIANTES
En cuanto a segundo medio, la segregación también disminuyó en un 27%, alcanzando niveles inferiores a los de 2003. En ese año, el Índice de Duncan marcaba 0,49 para los estudiantes de los dos quintiles más vulnerables, cifra que llegó a 0,52 en 2008 y empezó a caer desde 2013, alcanzando el 46% en 2024.
Los mayores avances se observaron en los colegios particulares subvencionados, donde la segregación interna en segundo medio cayó un 34,8% entre 2008 y 2024. Para cuarto básico, la reducción fue de un 42,4%.
EDUCACIÓN PÚBLICA
La educación pública también logró avances significativos, con una disminución del 35,4% en cuarto básico y del 35,9% en segundo medio. «Solo en el periodo de vigencia del SAE la segregación cayó 29,7% y 20,2% para cuarto básico y segundo medio respectivamente», dice el estudio.
«La sostenida reducción de la segregación social desde la Ley de Inclusión se explica casi por completo por una reducción de la segregación al interior de los establecimientos. El mayor aporte lo hacen los particulares subvencionados, donde la reducción del copago, la no selectividad y la regulación de nuevos establecimientos permitió una rápida y sostenida reducción de la segregación social», se asevera.
Finalmente, los investigadores advierten que, a pesar de estos avances, los niveles de segregación escolar en Chile siguen siendo elevados, y que los estudiantes de sectores más acomodados continúan estando más homogéneamente agrupados en ciertos establecimientos.