La directora del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), Natalia Riffo, se refirió al informe en torno al consumo de drogas y alcohol en la población escolar.
De acuerdo a lo explicado por Riffo, a través de una conversación con Radio Cooperativa, el estudio se realiza cada dos años y contempla una muestra representativa a nivel nacional y regional. En detalle, «encuestan a 49 mil estudiantes» de 8° básico a 4° Medio en 16 regiones del país.
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ESTUDIO DEL SENDA
En líneas generales, la directora del Senda concluyó que el estudio anterior se realizó en medio de la pandemia del covid-19, por lo que se constataba una «baja» en el consumo de sustancia por parte de la población escolar. Esto se podría explicar por diversos motivos, como por ejemplo, «mayor control de los padres y menos oferta».
«El temor que existía es que hubiese un rebote y que (las estadísticas) subieran a los niveles como prepandemia. Y eso, afortunadamente, en la mayoría de las sustancias no sucedió», afirmó Riffo.
Sin embargo, destacó que el estudio apunta a niños, niñas y adolescentes, por lo que «cualquier consumo es complejo en ese grupo etario».
CONSUMO DE DROGAS EN POBLACIÓN ESCOLAR
La directora de la organización afirmó que «descenso sostenido en tabaco y alcohol, que es algo que viene ya observándose hace muchos años, y (se puede ver) una estabilización también al consumo de marihuana».
Junto con ello, señaló que las cifras reflejan que «el camino sostenido de la prevención es el camino que tenemos que continuar».
No obstante, precisó que «nos preocupan» cifras que muestran «mayor prevalencia». «Pasta base y cocaína aparecen con un pequeño rebote en relación a los estudios anteriores», indicó.
En concreto, la cocaína pasó de 1,9% a 2,5% entre 2021 y 2023, mientras que la pasta base lo hizo de 1,1% a 1,8% en igual período.
DROGAS Y ALCOHOL EN MUJERES
También aseguró que «hoy día lo que observamos en este estudio es (…) que las mujeres escolares de octavos a cuartos medios declaran haber consumido más que los hombres: más tabaco, más alcohol y más marihuana».
En ese sentido, sostuvo que se debe «mirar este dato y decir cuáles las consecuencias que puede tener y cuáles son los resguardos que tenemos que tener».
Por ejemplo, contar con «perspectiva y enfoque de género en los programas de prevención». Debido a que las mujeres tienen «menor capacidad, por ejemplo, de metabolizar el alcohol» y que las mismas están «expuestas a mayores vulnerabilidades».
Cabe señalar que, en 2019, el 27% de los escolares varones bebía, lo mismo hacía el 32,5% de sus compañeras. En 2021, las cifras bajaron a 21,4% y 26,8%, respectivamente.
Mientras que, en la última encuesta (de 2023), los datos muestran que el 20,1% de los hombres consume alcohol, frente al 25,5% de ellas.
En el caso de la marihuana, en 2019 el 25,9% de los hombres la consumía, y en las mujeres la cifra llegaba al 27,7%. Dos años después, los porcentajes bajaron a 17,1% y 20,5% respectivamente. Ahora, las cifras son 16,9% para ellos y 21,4% para ellas.
