Las abogadas querellantes en la causa por la desaparición de Julia Chuñil revelaron que, mediante una interceptación telefónica, uno de los sospechosos admitió haber quemado a la líder mapuche.
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Cabe recordar que Chuñil desapareció hace casi un año en la comuna de Máfil, provincia de Valdivia, región de Los Ríos.
LLAMADAS
Según Karina Riquelme, una de las abogadas de la familia de la activista mapuche, en el sitio web del Ministerio Público se encontró el pasado lunes 15 de septiembre un documento clave.
Los antecedentes incluyen dos llamadas telefónicas: una al padre de Juan Carlos Morstadt, dueño del predio donde vieron por última vez a la defensora ambiental mapuche, y otra a una mujer que las autoridades aún no han identificado.
Sin embargo, cuando las juristas consultaron al Ministerio Público por más información, el ente persecutor las habría bloqueado del portal web de Fiscalía en Línea, acusaron.
JULIA CHUÑIL
La última vez que vieron a la mujer de 72 años fue el 8 de noviembre de 2024 en el sector de Huichaco Sur, comuna de Máfil, mientras estaba acompañada de su mascota «Cholito».
Casi diez meses después de la desaparición de Julia Chuñil Catricura, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó al Estado que redoble los esfuerzos para esclarecer lo ocurrido.
El director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Yerko Ljubetic, confirmó que monitorea estas medidas. «Con esto se pretende poner recursos adicionales para contar con un sistema de búsqueda sofisticado que le permitan al Ministerio Público continuar con la investigación por presunta desgracia de Julia Chuñil», señaló.
Ljubetic indicó que es «prematuro» saber si el Estado está redoblando los esfuerzos. No obstante, reconoció que hay ciertas diligencias que generan «roces» con las comunidades indígenas del sector y que no son necesarias para aclarar lo ocurrido con Julia Chuñil.
El director del INDH afirmó que han existido situaciones complejas durante la investigación. Esta inquietud fue manifestada al fiscal nacional, Ángel Valencia, y a la fiscal regional, Tatiana Esquivel, con la intención de que las diligencias fueran cuidadosas en ese sentido.