Política

Camila Polizzi al intentar acallar a un testigo desnuda las operaciones para defraudar al Estado (Video audio)

Mario López M.

Sí, don Gerardo. Pero escúcheme otra cosa… en el Gobierno (Regional) se olvidaron de eso, del episodio ese. Se olvidaron y usted tiene que olvidar eso igual. Eso es todo, aquí usted tiene que estar tranquilo.

Quizás, uno de los casos más escandalosos y que ya costó la «cabeza» de un funcionario público, es el caso «Polizzi». Se trata de la entrega de millonarios recursos desde el gobierno regional a una fundación «En Ti», que fue «arrendada por Camila Polizzi, un día antes del trato directo con la autoridad de gobierno y, en donde además, esta fundación contrató una OTEC también arrendada, por la pareja de Polizzi.

OPERACIÓN: ACALLAR AL TESTIGO

Tras estallar el caso en su contra, Camila Polizzi, excandidata a Alcalde por el Frente Amplio y luego a diputada por el PR, en ambos casos derrotada, hizo tremendos y burdos esfuerzos para que un testigo clave, guardara silencio y no diera a conocer los detalles del arriendo de la fundación con la que obtuvo 250 millones de pesos provenientes del Gobierno Regional.

Una visita personal y un llamado telefónico figuran entre los esfuerzos de la excandidata al municipio y al Congreso: «Usted tiene que olvidar», le hizo saber Polizzi al testigo clave.

La grabación difundida por Bío Bío, dura tres minutos y medio. Allí, Camila Polizzi intentó persuadir al titular de la fundación arrendada, quien será pieza clave en la indagatoria iniciada en su contra por el traspaso de $250 millones provenientes del Gobierno Regional del Bío Bío.

LA ARRENDÓ EN $10 MILLONES

Polizzi se valió de una fundación arrendada a cambio de $10 millones para conseguir $250 millones provenientes de fondos fiscales. El arrendador reconoce haber recibido el pago a cambio de entregar el timbre y la clave única para que Polizzi obtuviera fondos, aunque se muestra sorprendido del monto.

Según la grabación difundida por Bío Bío, quienes intervienen en la llamada son la propia Camila Polizzi y el dueño de la Fundación En Ti, Gerardo Silva, un hombre de edad y reconocido promotor de ayudas sociales en la zona.

En el registro, Polizzi pide a Silva desconocer los pagos efectuados por el arriendo del organismo y le reitera en diversas oportunidades que, en caso de que sea interrogado, se acoja a su derecho a guardar silencio.

DEBE GUARDAR SILENCIO

—Si van allá a tocarle la puerta, a preguntarle si usted puede o quiere declarar, usted sabe que puede guardar silencio y decir que yo soy la persona encargada del proyecto ¿Cierto? —le advierte de entrada Polizzi.

—Supongamos que llegaran… no, no, no creo. Pero si llegaran, usted tiene que saber que puede guardar silencio y decir que yo soy la encargada del proyecto para que esté tranquilo.

Polizzi le insiste en nueve oportunidades a Silva que debe estar “tranquilo”. Ciertamente, Silva no lo estaba ni lo está. La fundación, los montos y su nombre, aparecían ya en los medios y era un escándalo, que «no vio venir».

NI SIQUIERA LE PAGÓ LO PROMETIDO

—La fiscalía tiene todos los documentos, se los entregó el Gobierno Regional, se los entregamos nosotros… tienen todos los documentos —le asegura Polizzi.

Lo que se sabe, es que de los $10 millones comprometidos para el uso del nombre de la fundación y de la firma electrónica de su director debían ser pagados en dos cuotas por Polizzi, así lo reconoce el propio Silva, de acuerdo a lo consignado por Bío Bío. Sin embargo, Polizzi no pagó íntegro el dinero, en la segunda parte, faltaba un millón de pesos. Eso llevó a Silva a denunciarla ante el Gobierno Regional en abril de este año.

Desde el GORE, habrían contactado a Polizzi para que arreglara el entuerto que ya tomaba cariz de escándalo público.

—El único respaldo que tengo yo es esa cuestión que firmamos, el poder -le dice Silva a Polizzi-. No tengo nada más. Y tengo los pagos que usted… bueno, la plata que usted me dio.

Polizzi responde:

—No, yo no le he pasado nada a usted. Usted no ha recibido ningún dinero, nada po’. Si yo lo he ayudado a usted nomás, lo he ayudado… con las cuentas y todo. Pero nada más… Acuérdese de eso.

—Pero el Gobierno (Regional) sabe eso, el GORE sabe eso…—le asegura Silva.

—No, si no saben. Don Gerardo ¡No se confunda! ¡NO!

EN EL GOBIERNO (REGIONAL) SE OLVIDARON

—¿Se acuerda cuando yo la fui a acusar? -Le dice Silva-.

—¡Sí! Ellos se olvidaron de eso, se olvidaron, se olvidaron, ¿Me entiende? Ellos se olvidaron de eso, se olvidaron, ¿Me entiende o no? (…) Ellos se olvidaron de eso, usted tranquilo y usted tiene que olvidar esto también.

—Pero en la prensa aparecen $250 millones…

—Sí, don Gerardo. Pero escúcheme otra cosa… en el Gobierno (Regional) se olvidaron de eso, del episodio ese. Se olvidaron y usted tiene que olvidar eso igual. Eso es todo, aquí usted tiene que estar tranquilo. (…) Usted tiene que estar tranquilo, pero tiene que saber eso no mas po’, que usted puede guardar silencio y el proyecto lo hice yo y a mí me tienen que preguntar ¿Me entiende?

LA CONFESIÓN DE SILVA

De acuerdo a lo informado por Radio Bío Bío en Concepción, Gerardo Silva habría confirmado tanto el arriendo de la fundación para que Camila Polizzi obtuviera el proyecto, como los dineros ofrecidos y recibidos. Según cuenta, lo contactaron a través de un amigo en común con Sebastián Polanco. Este último pareja de Polizzi y quien está detrás de la OTEC también arrendada y que recibió fondos.

—Me piden todo con Clave Única, todos los documentos con Clave Única.

—¿Y le ofrecieron algún dinero a cambio?

—Mire, me ofreció 10 millones de pesos.

—¿Y esa plata era por qué?

—Para todo lo que es administración, para mí. No era para la fundación. Para que yo me quedara callado. (…) Ella me dijo eso: que dijera que ella no me pagó a mí.

—Pero a usted sí le pagó…

—Lo dio en dos pagos, en dos pagos (…).

—¿Por qué usted fue al Gobierno Regional a reclamar?

—Porque ella no había cumplido con el trato que habíamos hecho, se me estuvo corriendo. Y yo hice una reunión con el GORE y a ella “la llamaron a terreno” (…) que era mejor que llegara a un acuerdo y me devolviera un millón de pesos que me había descontado.

EL ÚLTIMO INTENTO DE SILENCIARLO

Polizzi no quedó al parecer convencida de que Silva guardara silencio, por eso, lo habría visitado en la región de La Araucanía para hablarle personalmente. A esa cita inesperada, asistió con Polanco, señala Silva a Bío Bío, eso habría ocurrido la semana recién pasada.

—¿Y qué le dijeron?

—Que me calmara, que me relajara. Que ella era responsable por el proyecto.

—¿Y cuánto rato estuvieron ahí con usted?

—Un rato, como una hora, tomaron once conmigo y se fueron (…) Me dijo que yo no vaya a la Corte, que no vaya al Gobierno, que no hable nada. Dijo que si viene la PDI, que no diga nada.

 

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