La Inmobiliaria San Valentino SpA informó que, «tras un extenso e injustificado proceso de dilaciones», ya se realizó la inscripción en el Conservador de Bienes Raíces de Santiago (CBRS) de la exclínica Sierra Bella a nombre del municipio liderado por Mario Desbordes (RN).
Así se dio cumplimiento a lo dispuesto por el 19° Juzgado Civil de Santiago, que acogió el reclamo de la Inmobiliaria.
“Como siempre sostuvimos, se trata de un contrato plenamente válido, aprobado por el Concejo Municipal de Santiago y cuya eficacia nunca debió ponerse en duda”, explicaron a través de un comunicado.
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Según la empresa, el siguiente paso será iniciar el procedimiento de cobro del precio total «junto a los graves daños causados».
«NO SIRVE PARA NADA»
El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, había manifestado su intención de apelar a la decisión, luego de que el tribunal ordenara su compra el pasado 9 de septiembre.
Sin embargo, la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el recurso del municipio y confirmó el sobreseimiento definitivo de los imputados en la causa, entre ellos Hassler, el dueño de la exclínica, Felipe Sánchez, y tres tasadores privados.
Esto ratifica la resolución del pasado 30 de julio del 7° Juzgado de Garantía de Santiago, que impide la reapertura de la investigación solicitada por el municipio.
“No me queda más que lamentar una resolución judicial que nos parece completamente equivocada”, expresó en conversación con CNN Chile al concer la orden de inscribir la exclínica Sierra Bella en el CBRS.
El jefe comunal además acusó una “pésima gestión anterior” de parte de su antecesora, Hirací Hassler, y aseguró que el inmueble actualmente «no le sirve para nada», ya que no cuenta con la infraestructura necesaria para albergar un centro de salud comunal, como se pretende.
El inmueble se vendió a la municipalidad de Santiago por más de $8.200 millones, operación que generó diversas críticas y permanecía trabada desde el 20 de enero de 2023, fecha en que se firmó la compra venta.
Según peritos habilitados por la Corte de Apelaciones, el inmueble tendría un valor real de $2.000 millones.