“La Justicia Militar no está diseñada para investigar organizaciones criminales y menos crimen internacional“, recalcó el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero.
Lo dijo en relación con la investigación por narcotráfico en una de las unidades del Ejército de Tarapacá y el caso similar que enfrenta la Fuerza Aérea de Chile, donde se instaló una contienda de competencia entre la Fiscalía de Aviación y el Ministerio Público por los cinco funcionarios de la FACh, dados de baja porque intentaron trasladar droga a Santiago desde la Base Los Cóndores, en un avión institucional.
Se trataba de ketamina, sustancia vinculada con el Tren de Aragua.
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Para el secretario de Estado, hay dos problemas.
“Primero, la Justicia Militar descansa en el sistema antiguo y en un régimen regulatorio que es demasiado arcaico. Y lo segundo es que la Justicia Militar, aún modernizada, no está diseñada para, y su propósito central no es, desbaratar organizaciones criminales, especialmente criminalidad internacional, que es el riesgo que tenemos en la zona fronteriza”, puntualizó.
#CNNChileRadio | Ministro Luis Cordero habla sobre el Caso Drogas en las FF. AA.
«La principal inquietud son las estructuras detrás de esto».
«La justicia militar no fue diseñada para investigar organizaciones criminales».
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A su juicio, “la dilación o el retraso tiene un impacto en las investigaciones” de narcotráfico.
“En los casos de organizaciones criminales es más relevante aún. Muchas de estas investigaciones, de hecho, suelen iniciarse con cierta reserva, que fue el caso del Ejército”, especificó el ministro en CNN Chile Radio.
Cordero expuso que hay “toda una estructura de investigación y levantamiento de antecedentes vinculadas a organizaciones criminales, que son claves en los primeros días de la investigación”.
«EL ÚLTIMO ESLABON»
El Cordero recalcó también que la penetración del narcotráfico en las FF.AA. representa una amenaza de la mayor gravedad.
“Las Fuerzas de Orden y Seguridad y también las Fuerzas Armadas son el último eslabón. Después de eso, no hay nada más”, afirmó. “Ese es el nivel de seriedad con el cual el país tiene que tomar esto”,.
El secretario de Estado apuntó a una amenaza sistémica: el crimen organizado transnacional estaría intentando utilizar la infraestructura y logística institucional de las FF.AA. para el tráfico de drogas. “Las bandas criminales detectaron una oportunidad: usar la estructura del Ejército o de la FACH para cumplir sus fines. Eso habla de cierto grado de penetración”, señaló.
“Hoy esas estructuras deben reforzar sus controles internos porque están expuestas estructuralmente”, dijo. Además, explicó que el crimen organizado busca corromper tres pilares del Estado: el sistema judicial, las policías y las Fuerzas Armadas.
“En cada uno de esos espacios debemos levantar mecanismos de resistencia institucional”, añadió.