El actual alcalde de Santiago, Mario Desbordes, perteneciente a Renovación Nacional, ha expresado su descontento con la administración previa de Irací Hassler, quien es parte del Partido Comunista. Desbordes no ha escatimado en señalar las deficiencias que, a su juicio, marcaron el periodo de su antecesora.
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A su entender, la gestión de Hassler resultó en una «pérdida significativa de recursos económicos», lo que ha dejado a la municipalidad con un déficit que asciende a $13 mil millones. En una charla con el medio La Tercera, Desbordes indicó que en poco tiempo de asumir, se han dado cuenta de que la situación financiera del municipio es más comprometida de lo que se imaginaban.
Desbordes mencionó que se han encontrado con un déficit de $13 mil millones y una serie de contratos que no han sido gestionados adecuadamente, incluido uno relacionado con vehículos de seguridad que vence el 1 de febrero.
Además, el alcalde resaltó la grave situación en la Corporación de Desarrollo, donde la gestión anterior no solo no entregó la información necesaria, sino que dejó a las direcciones de Educación y Salud con serios problemas administrativos y un vacío importante en su funcionamiento.
ACUSACIÓN DE DESORGANICACIÓN
El alcalde no dudó en calificar la administración de Hassler como «muy desordenada», lo que les ha llevado a considerar la posibilidad de iniciar acciones legales. Desbordes afirmó que la gestión anterior provocó una considerable pérdida de recursos financieros, dejando todo en un estado caótico, y que ya están evaluando posibles denuncias penales.
El alcalde destacó la gravedad de la situación al mencionar que hay cuatro meses de cotizaciones previsionales impagas y que actualmente no hay suficientes recursos para abonar los sueldos correspondientes a finales de diciembre y enero.
GESTIÓN MUNICIPAL
Finalmente, Desbordes reflexionó sobre las habilidades necesarias que debe tener un alcalde o alcaldesa para gestionar adecuadamente una comuna tan compleja como Santiago. Resaltó la importancia de establecer vínculos de colaboración estrechos con diversas autoridades, desde la ministra del Interior hasta el gobernador regional, en este caso, Claudio Orrego, quien mantiene una buena relación con él.
El alcalde enfatizó que se requiere «voluntad y determinación» para abordar los problemas en una comuna que presenta un deterioro notable en sus espacios públicos, enfrenta problemas de seguridad y alto índice de criminalidad.
