Un grupo de 18 dirigentes de la Democracia Cristiana (DC), entre ellos vicepresidentes nacionales, consejeros y presidentes regionales, hizo pública una declaración que marca un punto de inflexión en el debate interno del partido frente a las próximas elecciones presidenciales. En el texto, suscrito a título personal, los firmantes instan a la colectividad a no aislarse y a buscar un acuerdo programático con otras fuerzas políticas, incluyendo la candidatura de Jeannette Jara (PC), hoy abanderada del oficialismo.
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La misiva recuerda el ideario fundacional de la DC y reafirma su carácter como una organización “de inspiración cristiana, no confesional y de vocación popular”, nacida con la misión de ofrecer una alternativa en contextos polarizados. Los firmantes lamentan que en las últimas décadas el partido se haya desviado de esa vocación transformadora, quedando “atrapado en una lógica meramente electoralista, alejada de su alma y misión”.
CRÍTICA A LA DERIVA ELECTORAL Y LLAMADO A RETOMAR LA VOCACIÓN TRANSFORMADORA
Los firmantes sostienen que la DC nació para interpretar las necesidades del pueblo y transformar la realidad social del país, pero que esa vocación se ha ido debilitando. En el documento, evocan la figura de Radomiro Tomic y su llamado a construir la “unidad política y social del pueblo”, recordando que la incomprensión de esa visión también contribuyó al clima que precedió al golpe de Estado de 1973.
Advierten además sobre una “oleada regresiva” en Chile y el mundo, impulsada por una derecha reaccionaria que —según acusan— recurre a mentiras y tergiversaciones para desmantelar los avances sociales alcanzados en democracia. En este contexto, consideran urgente que la DC retome su espíritu fundacional.
RESPALDO A JARA Y CRÍTICA A LA DERECHA: “EL VERDADERO PELIGRO”
Uno de los pasajes más significativos de la declaración apunta al escenario electoral: “La candidatura presidencial de Jeannette Jara no representa, a nuestro juicio, un peligro para la democracia chilena. Al contrario, el peligro para las personas está en las propuestas de las candidaturas de derecha”, afirman.
El texto rechaza las declaraciones de Evelyn Matthei sobre la violencia durante el golpe militar y cuestiona duramente a los candidatos de extrema derecha como José Antonio Kast y Johannes Kaiser, a quienes acusan de representar visiones autoritarias y excluyentes.
POR UNA COALICIÓN AMPLIA Y UN PROGRAMA COMÚN
Los dirigentes señalan que la Democracia Cristiana no debe “perderse en la soledad del camino propio”, en alusión a la idea de levantar una candidatura presidencial propia. En cambio, llaman a construir una coalición política y un pacto parlamentario amplio que permita mantener la representación del partido en el Congreso.
Además, proponen un “entendimiento programático” que contemple respuestas concretas en temas como crecimiento económico, seguridad, salud, educación y protección del medio ambiente.
Entre los firmantes destacan Paulina Mendoza y Pedro Concha, actuales vicepresidentes nacionales; Renata Vásquez, presidenta nacional de la Juventud Demócrata Cristiana; y Flavio Garrido, presidente del Frente de Trabajadores. La carta también cuenta con el respaldo de presidentes regionales y consejeros nacionales de distintas zonas del país.
MYRIAM VERDUGO: “NO TRANSFORMARNOS EN UN ORGANISMO QUE SE MUEVE SOLO POR EL ANTI-ALGO”

Entre las voces destacadas del grupo firmante, la periodista Myriam Verdugo, exsubdirectora del Servicio Nacional de la Mujer, expresidenta del PDC y actual consejera nacional— subrayó el sentido profundo de esta declaración.
“Básicamente es un llamado a seguir conversando y dialogando, y buscando las mejores alternativas parlamentarias, que es la única posibilidad que nosotros tenemos de continuar como partido”, señaló.
“En esa discusión, proponemos recordar nuestra historia reciente, historia en la cual nosotros éramos capaces de ser convocados a lo que se llamó la unidad social y política del pueblo. Un llamado que fue desoído en su momento por las fuerzas de izquierda, lo rechazaron porque además estábamos viviendo un clima muy polarizado” explicó la dirigente.
Verdugo advirtió que ese fue uno de los muchos errores que condujeron al golpe militar de 1973, y llamó a no repetirlo. “El llamado es a tener la mente amplia para conversar, no transformarnos en un organismo que nos mueve solamente el anti-algo”.
Esta declaración, que no representa una posición oficial del partido, reaviva el debate sobre el futuro político de la DC y podría tensionar aún más las definiciones que debe tomar la directiva en los próximos meses frente al proceso presidencial.