La reforma al sistema político impulsada por el Gobierno de Gabriel Boric enfrenta un nuevo obstáculo luego de que se eliminara la exigencia de un umbral del 5% de votos para que los partidos políticos puedan acceder a escaños en la Cámara de Diputados.
La medida ha generado división en el oficialismo, especialmente en el Partido Socialista (PS), que considera la decisión un retroceso en la lucha contra la fragmentación del Congreso.
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Los senadores socialistas manifestaron su descontento tras conocer las indicaciones sustitutivas enviadas por La Moneda, las cuales reemplazan el texto original de la reforma constitucional.
La eliminación del umbral se consideró una concesión a partidos minoritarios que temen desaparecer si no alcanzan el 5% de los votos.
El senador Fidel Espinoza criticó la medida señalando que «desistir del umbral del 5% es haber sucumbido ante las presiones de los partidos minoritarios».
En tanto, el senador Gastón Saavedra indicó que esta decisión parece estar orientada a tranquilizar a Apruebo Dignidad y evitar la desaparición de partidos pequeños.
REACCIONES EN EL CONGRESO
El debate también se ha trasladado a la Cámara de Diputadas y Diputados, donde varios legisladores han manifestado su rechazo al cambio en la reforma.
El diputado Tomás de Rementería, cercano a la presidenta del PS, Paulina Vodanovic, sostuvo que la eliminación del umbral es «una mala noticia», pues considera que es clave para reducir la atomización política y mejorar la estabilidad del sistema.
La eliminación del umbral del 5% en la reforma al sistema político sigue generando debate en el Congreso.
El senador Fidel Espinoza criticó la decisión afirmando que «desistir del umbral del 5% es haber sucumbido ante las presiones de los partidos minoritarios». Por su parte, el senador Gastón Saavedra sostuvo que la medida busca calmar a Apruebo Dignidad y evitar la desaparición de partidos pequeños.
Asimismo, la diputada Javiera Morales, del Frente Amplio, señaló que su sector no teme al umbral del 5% ya que cumplen con los requisitos exigidos.
«Después de la fusión del Frente Amplio, este se transformó en el partido con más militantes en el país. Valoramos las indicaciones del Ejecutivo porque recogen gran parte de nuestra propuesta de reforma», afirmó. Además, destacó que la discusión debe centrarse en mejorar el sistema político con buena fe y no desde cálculos partidarios.
DEFENSA DEL GOBIERNO
El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, defendió la decisión del Ejecutivo asegurando que existe una norma vigente que estipula que un partido debe alcanzar el 5% de los votos en al menos tres regiones o lograr cuatro parlamentarios para mantener su existencia legal.
Además, el Gobierno planea modificar la reforma para evitar el cambio de bancada de los legisladores y mejorar la representación política.
El futuro de la reforma sigue siendo incierto, con una creciente tensión dentro del oficialismo y un debate abierto en el Congreso sobre el camino a seguir para reducir la fragmentación política en Chile.
